La Vicepresidenta Kamala Harris se encuentra en una posición favorable para asumir la candidatura presidencial tras la retirada de Joe Biden, según analistas políticos.

Washington: Con la decisión de Joe Biden de abandonar la carrera presidencial, la Vicepresidenta Kamala Harris se posiciona como la candidata más fuerte para sucederle.

Harris cuenta con una ventaja significativa sobre otros nombres que han sido considerados como posibles alternativas demócratas, como el Gobernador de California, Gavin Newsom, y la Gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer.

La actual Vicepresidenta ya ha sido parte de una boleta ganadora junto a Biden y ha cultivado una considerable cantidad de apoyo entre las bases del partido a lo largo de los años.

Además, es muy probable que tenga acceso a una gran cantidad de fondos recaudados por la campaña de reelección de Biden, que, según informes, ha alcanzado cifras cercanas a 100 millones de dólares (aproximadamente 93 millones de euros).

Un análisis más profundo de sus posibilidades revela varios factores favorables.

En primer lugar, la aprobación de Biden entre las bases del Partido Demócrata es un activo clave que Harris podría aprovechar.

Aunque las reglas del partido impiden que Biden transfiera directamente los delegados acumulados durante la Convención Nacional Demócrata del próximo mes, ya se han manifestado varios delegados indicando su lealtad hacia Harris.

Esto podría facilitar su acceso a la nominación sin enfrentar la fricción interna que podría surgir al elegir a otro candidato.

El apoyo de Biden a Harris podría minimizar la posibilidad de conflictos y desacuerdos acalorados que normalmente surgen durante las primarias, obstáculos que podrían resultar perjudiciales para el candidato que finalmente enfrente al republicano Donald Trump.

"Harris es la opción más lógica para continuar con el legado de Biden", opina Andrew Feldman, un estratega demócrata que trabaja estrechamente con diversos partidos estatales.

“La agenda de la administración Biden ha sido enormemente popular en términos de los temas que han defendido”, agregó Feldman.

Históricamente, el Partido Demócrata ha visto a figuras femeninas asumir roles de liderazgo en tiempos de transición.

Kamala Harris, la primera mujer de color en ocupar el cargo de Vicepresidenta en la historia de EE.UU., representa un cambio significativo en la dinámica política del país.

Esta es una oportunidad para que ella continúe forjando su propia senda política mientras apoya los ideales de la administración actual.

Con la atención centrada en las elecciones de 2024, todos los ojos estarán puestos en cómo se desenvuelven las próximas semanas y si Harris podrá consolidar su posición como la opción predilecta de los demócratas para enfrentar a Trump y, potencialmente, marcar el rumbo de la política estadounidense por los próximos años.