La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha tomado la decisión de despedir a doce de sus empleados en la Franja de Gaza y ha iniciado una investigación para esclarecer las acusaciones realizadas por Israel.

Según estas acusaciones, los empleados habrían ayudado a planificar y participar en el asalto terrorista del pasado 7 de octubre, en el que perdieron la vida alrededor de 1200 israelíes y más de 240 personas fueron capturadas.

Los trabajadores despedidos, todos ellos hombres empleados por la agencia de la ONU que ayuda a los palestinos, conocida por el acrónimo UNRWA, están sujetos a una investigación penal, según han informado dos funcionarios de la ONU.

En respuesta a estas acusaciones, Philippe Lazzarini, jefe de la agencia, ha reiterado la condena en los términos más enérgicos posibles a los abominables ataques.

Además, ha afirmado que cualquier empleado de la UNRWA involucrado en actos de terror será considerado responsable y se enfrentará a acciones legales.

Un alto funcionario de la ONU, informado sobre estas acusaciones, ha calificado las mismas como extremadamente serias y horribles.

Durante mucho tiempo, la UNRWA ha negado las afirmaciones de Israel de que fomenta la incitación antiisraelí en Gaza.

Sin embargo, ha adoptado una postura notablemente diferente ante las acusaciones más graves, apenas unos días después de que Israel las presentara a la agencia.

Estas acusaciones han llevado rápidamente a Estados Unidos, el mayor donante de la UNRWA, a suspender temporalmente la financiación a la organización.

La UNRWA, que proporciona servicios sociales en la Franja de Gaza, ha sido la principal agencia encargada de la distribución de ayuda a los palestinos en medio de una grave crisis humanitaria en el territorio que se ha agravado a lo largo de meses de guerra desde el ataque del 7 de octubre.

En un comunicado, el Departamento de Estado de Estados Unidos se mostró muy preocupado por las acusaciones de que doce empleados de la UNRWA podrían haber estado involucrados en el ataque terrorista de Hamas el 7 de octubre contra Israel.

Estados Unidos proporcionó a la agencia 340 millones de dólares en 2022 y varios cientos de millones de dólares en 2023.