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Nueva York: La viuda de 93 años de un financiero de Wall Street ha donado una fortuna a una escuela de medicina en el Bronx, el Albert Einstein College of Medicine, con instrucciones de que el regalo se utilice para cubrir la matrícula de todos los estudiantes en perpetuidad.

La donante, Ruth Gottesman, es una ex profesora en Einstein, donde estudió discapacidades del aprendizaje, desarrolló una prueba de detección y dirigió programas de alfabetización.

Con 1.000 millones de dólares estadounidenses (1.500 millones de euros), el suyo es una de las mayores donaciones caritativas a una institución educativa en los Estados Unidos y probablemente la mayor a una escuela de medicina.

Los fondos provienen de su difunto esposo, David Gottesman, conocido como Sandy, quien fue un protegido de Warren Buffett y había realizado una inversión temprana en Berkshire Hathaway, el conglomerado que Buffett construyó. La donación es notable no solo por su tamaño asombroso, sino también porque va a una institución médica en el Bronx, el suburbio más pobre de la ciudad.

Durante la última generación, varios multimillonarios han donado cientos de millones de dólares a escuelas de medicina y hospitales más conocidos en Manhattan, el suburbio más rico de la ciudad.

El Bronx tiene una alta tasa de muertes prematuras y se clasifica como el condado menos saludable de Nueva York.

Gottesman dijo que su donación permitiría a los nuevos médicos comenzar sus carreras sin deudas de la escuela de medicina, que a menudo superan los 200.000 dólares estadounidenses.

También esperaba que ampliara el cuerpo estudiantil para incluir a personas que de otro modo no podrían permitirse asistir a la escuela de medicina.

Mientras su esposo dirigía una firma de inversiones, First Manhattan, Gottesman tuvo una larga carrera en Einstein, una escuela de medicina bien considerada, comenzando en 1968, cuando tomó un trabajo como directora de servicios psicoeducativos.

Desde hace mucho tiempo ha sido miembro de la junta de fideicomisarios de Einstein y actualmente es la presidenta.

En los últimos años, se ha hecho amiga cercana del Dr.

Philip Ozuah, el pediatra que supervisa la escuela de medicina y su hospital afiliado, el Montefiore Medical Centre, como CEO del sistema de salud.

Esa amistad y confianza tuvieron un gran peso mientras contemplaba qué hacer con el dinero que le había dejado su esposo.