Mary Donaldson, una vez agente inmobiliaria y estudiante de derecho en Tasmania, se convertirá en reina de Dinamarca después de más de 20 años desde su encuentro fortuito en un bar de Sídney. La inesperada abdicación de la reina Margrethe II, anunciada el 14 de enero a la edad de 83 años, ha tomado por sorpresa a los observadores de la monarquía reinante más antigua de Europa.
Hace más de 20 años que Mary Donaldson, en aquel entonces agente inmobiliaria y estudiante de derecho en Tasmania, conoció a su futuro esposo, el príncipe Federico de Dinamarca, en un bar de Sídney.
Ahora, se prepara para completar su viaje desde estudiante de derecho a reina de Dinamarca.
La noticia de la abdicación de la reina Margrethe II ha sorprendido a todos.
Incluso a los observadores más experimentados de la monarquía reinante más antigua de Europa les tomó desprevenidos.
La reina anunció inesperadamente su decisión el 14 de enero, a la edad de 83 años.
Apodada cariñosamente como la "Reina Cenicero" por su afición a los cigarrillos, Margrethe ha estado en un estado de salud deteriorado últimamente, pero no había dado ninguna pista de que tomaría una medida tan drástica.
Pariente en tercer grado de la fallecida Isabel II a través de la reina Victoria, Margrethe mencionó en su discurso anual de víspera de Año Nuevo que una reciente operación de espalda la hizo reflexionar sobre la posibilidad de "pasar la responsabilidad a la siguiente generación".
"El tiempo pasa factura y los achaques aumentan.
Uno no puede hacer tanto como antes", declaró.
La única referencia significativa la estableció el rey Eric III, quien abdicó en 1146 por razones desconocidas.
La partida planeada de Margrethe deja a la princesa heredera de 51 años, quien por sí misma se ha convertido en una de las royals más ocupadas de Europa, con tan solo dos semanas antes de convertirse en reina junto a su esposo, Federico.