Análisis de la inteligencia surcoreana sugiere que Kim Ju-ae, la hija de Kim Jong-un, podría ser la elegida para continuar con el liderazgo norcoreano.
En un análisis reciente, fuentes de inteligencia surcoreanas han afirmado que Kim Ju-ae, la joven hija de Kim Jong-un, podría estar siendo entrenada para asumir el liderazgo de Corea del Norte en un futuro cercano.
Esta información surge en un contexto de creciente preocupación por la salud del líder norcoreano, que ha alimentado los rumores sobre su posible sucesión.
Durante una reunión celebrada el lunes con un comité parlamentario en Seúl, el Servicio Nacional de Inteligencia (NIS) presentó sus conclusiones acerca de este tema.
Los analistas se basaron en la frecuencia y la naturaleza de las apariciones públicas de Kim Ju-ae, así como en la propaganda estatal que rodea su papel en la dinastía Kim.
Se estima que la niña tiene aproximadamente 11 años y se la ha visto en múltiples ocasiones en compañía de su padre en eventos de gran importancia, incluidos desfiles militares.
Kim Ju-ae fue presentada al mundo durante el lanzamiento de un misil balístico intercontinental en noviembre de 2022, y desde entonces ha sido invitada a encuentros con altos mandos militares, lo que ha reforzado la percepción de que podría ser la heredera del régimen.
La prensa controlada por el estado se ha referido a ella como la “hija respetada” y la “querida niña”, así como una “gran persona de guía”, un título que suele reservarse para los líderes de alto rango y sus sucesores.
Según el NIS, un asombroso 60 por ciento de las actividades de Kim Ju-ae consisten en acompañar a su padre en eventos militares, lo que ha llevado a muchos a considerar su papel dentro de la estructura de poder del país.
Lee Seong-kwon, un político que estuvo presente en la reunión, informó a los medios que es evidente que Pyongyang está preparando a Kim Ju-ae para convertirse en la sucesora más probable de Kim Jong-un.
“La situación demuestra que están educando a Kim Ju-ae para ser la heredera”, declaró Lee a los periodistas.
Sin embargo, el NIS también advirtió que no se descarta la posibilidad de que un hermano de Kim Jong-un pueda reclamar el trono en caso de ser necesario.
La cuestión de la sucesión ha cobrado cada vez más relevancia, especialmente en los últimos años, a medida que han surgido especulaciones sobre los problemas de salud de Kim, así como sobre su estilo de vida poco saludable.
Se han reportado hábitos de consumo excesivo de alcohol y tabaco, junto con niveles altos de estrés que podrían impactar su capacidad para liderar.
Históricamente, la dinastía Kim ha mantenido el poder en Corea del Norte desde la fundación del país, comenzando con Kim Il-sung, quien fue el primer líder tras la Segunda Guerra Mundial.
Kim Jong-un asumió el poder en 2011 tras la muerte de su padre, Kim Jong-il, y ha llevado a cabo una serie de reformas militares y nucleares.
El futuro político de Corea del Norte, con Kim Ju-ae como potencial sucesora, generará sin duda interés y expectación tanto a nivel nacional como internacional.
Las dinámicas de poder en el régimen norcoreano continuarán siendo objeto de análisis en los próximos años mientras se espera observar si la joven jugará un papel crucial en la continuidad de la familia Kim.