En una escalada de tensiones en la región, aviones de combate israelíes atacaron objetivos de Hezbollah en el valle de la Bekaa, en Líbano.

Según fuentes en Líbano, al menos dos miembros de Hezbollah murieron en el ataque más profundo de Israel en territorio libanés desde que estallaron las hostilidades con el grupo respaldado por Irán en octubre pasado.

En respuesta, Hezbollah disparó 60 cohetes contra una sede del ejército israelí en los Altos del Golán ocupados por Israel, según informó la televisión al-Manar del grupo.

Un portavoz del ejército israelí dijo que decenas de cohetes fueron disparados hacia los Altos del Golán desde Líbano.

Estos ataques marcan una intensificación de la peor violencia entre el fuertemente armado Hezbollah e Israel desde su guerra de 2006, alimentando la preocupación por el potencial de una escalada adicional y un desbordamiento regional de la guerra en Gaza.

La aviación israelí dijo que sus aviones de combate habían atacado las defensas aéreas de Hezbollah en el valle de la Bekaa en respuesta al derribo de un dron israelí, que Hezbollah dijo haber derribado con un misil tierra-aire el lunes.

Los bombardeos alcanzaron una parte de la región del valle de la Bekaa cerca de la frontera con Siria, que es un bastión político de la milicia chiíta islamista Hezbollah.

El área objetivo estaba a unos 18 kilómetros de la ciudad de Baalbek, conocida por sus antiguas ruinas.

Fuentes señalaron que Israel llevó a cabo ataques simultáneos en la zona.

Una fuente de seguridad libanesa y otra fuente familiarizada con el asunto dijeron que dos miembros de Hezbollah habían sido asesinados.

En un ataque separado, un bombardeo israelí golpeó un automóvil en la ciudad de Mjadel, al sur de Líbano, matando a un comandante de campo de Hezbollah, según tres fuentes de seguridad en Líbano.