En Medio Oriente, Jerusalén: Una orden de evacuación por parte del ejército israelí esta semana que cubre aproximadamente un tercio de la Franja de Gaza llega en un momento en el que la población está cada vez menos preparada para manejar los desplazamientos forzados repetidos, después de casi nueve meses de guerra que han dejado decenas de miles de muertos y heridos y han puesto al territorio en riesgo de hambruna.

La orden, que Naciones Unidas ha estimado que afecta a alrededor de 250.000 personas, fue la más grande desde octubre, cuando aproximadamente 1 millón de residentes del norte de Gaza recibieron la orden de abandonar sus hogares, según informó la organización esta semana.

Los palestinos buscan cuerpos y supervivientes entre los escombros de un edificio residencial destruido en un ataque aéreo israelí.

“Es un ciclo interminable de muerte y desplazamiento”, dijo Louise Wateridge, una portavoz de la principal agencia de la ONU que ayuda a los palestinos, UNRWA, en mensajes de voz desde el centro de Gaza.

“La gente expresa aquí que están perdiendo la esperanza, están perdiendo la fuerza de voluntad, enfrentados a otro desplazamiento forzado y absolutamente ninguna certeza de seguridad”.

El ejército israelí emitió la advertencia para abandonar grandes partes de las ciudades de Jan Yunis y Rafah el lunes (hora de Gaza), y para el martes miles de personas ya habían comenzado a huir.

La orden fue seguida por una noche de bombardeos intensos en áreas del sur y centro de Gaza.

La orden llegó después de que el ejército israelí dijo que grupos armados palestinos lanzaron una lluvia de aproximadamente 20 cohetes desde Gaza hacia ciudades israelíes el lunes.

La gente huye del norte de Gaza mientras los tanques israelíes bloquean una carretera en noviembre pasado.

Un portavoz del Secretario General de la ONU, Stéphane Dujarric, dijo que sus colegas estaban “profundamente preocupados” por el impacto de la orden.

“Las personas se ven obligadas a la elección imposible de tener que reubicarse, algunas probablemente por segunda o incluso tercera vez, a áreas que apenas tienen espacios o servicios, o quedarse en áreas donde saben que habrá fuertes enfrentamientos”, dijo.