Un israelí dijo que estar bajo los efectos del LSD durante el ataque liderado por Hamas el 7 de octubre provocó una revelación espiritual que le ayudó a escapar de la masacre en un rave en el desierto.

Otro está seguro de que la droga MDMA lo hizo más decidido y le dio la fuerza para cargar a su novia mientras huían de la escena.

Un tercero dijo que experimentar el asalto durante un viaje psicodélico le ha ayudado a procesar de manera más completa el trauma.

Alrededor de 4000 asistentes se reunieron la noche del 6 de octubre en un campo del sur de Israel, a pocos kilómetros de la frontera de la Franja de Gaza, para el festival de música Tribe of Nova.

Al amanecer, miles de terroristas liderados por Hamas atacaron las defensas de Israel bajo el amparo de una lluvia de cohetes.

Artículos dispersos en el festival Tribe of Nova, 10 días después de que fuera atacado por terroristas liderados por Hamas.

Crédito: Tamir Kalifa/The New York Times

Ese día fallecieron alrededor de 1200 personas, el más mortífero en la historia de Israel según las autoridades israelíes, incluyendo 360 solo en el rave.

Muchos de los ravers estaban bajo la influencia de sustancias que alteran la mente como LSD, MDMA y ketamina mientras presenciaban la carnicería o huían por sus vidas.

Para un grupo de investigadores israelíes de la Universidad de Haifa, el ataque ha creado una rara oportunidad para estudiar la intersección entre el trauma y las drogas psicodélicas, un campo que ha generado un interés creciente entre los científicos en los últimos años.

Los sobrevivientes del festival Nova presentan un estudio de caso que sería imposible de replicar en un laboratorio: un gran grupo de personas que sufrieron trauma mientras estaban bajo la influencia de sustancias que vuelven al cerebro más receptivo y maleable.

Ilegales en la mayoría de los países, incluido Israel, estas sustancias están al borde de entrar en la corriente principal de la psiquiatría.

Investigaciones recientes sugieren que dosis cuidadosas de drogas como MDMA y psilocibina, el ingrediente activo en los "hongos mágicos", podrían ser útiles en el tratamiento del trastorno de estrés postraumático.

Los participantes del festival estaban bajo la influencia durante su trauma, no en un entorno clínico controlado, pero los investigadores dicen que estudiarlos podría ayudar a los científicos a comprender mejor cómo las drogas psicodélicas podrían ser utilizadas para tratar a pacientes después de un evento traumático.

Los investigadores encuestaron a más de 650 sobrevivientes de Nova.

Aproximadamente el 23 por ciento dijo haber tomado alucinógenos como LSD, también conocido como ácido, y alrededor del 27 por ciento usó MDMA, un estimulante y psicodélico comúnmente llamado molly o éxtasis.

Muchos asistentes utilizaron más de una sustancia.

Los participantes en la encuesta describieron una variedad de experiencias mientras usaban drogas el 7 de octubre, que iban desde alucinaciones hasta una claridad extrema, desde pánico hasta resolución y desde parálisis hasta acción.