El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y los líderes de Corea del Sur y Japón han realizado una fuerte condena conjunta al "comportamiento peligroso y agresivo" de China en el Mar de China Meridional y han acordado profundizar los lazos militares y económicos. En un comunicado conjunto, los tres líderes se comprometieron a establecer una línea directa para consultar entre sí durante las crisis y a coordinar respuestas a los desafíos regionales, provocaciones y amenazas que afecten a los intereses comunes. Además, acordaron celebrar ejercicios militares conjuntos anualmente y compartir información en tiempo real sobre los lanzamientos de misiles norcoreanos para finales de 2023. Estos compromisos representan un avance significativo en las relaciones entre Corea del Sur, Japón y Estados Unidos.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, junto a los líderes de Corea del Sur y Japón, ha emitido una fuerte condena a China por su "comportamiento peligroso y agresivo" en el Mar de China Meridional.
En un encuentro celebrado en Camp David, Maryland, los líderes se comprometieron a fortalecer sus lazos militares y económicos.
Además, acordaron establecer una línea directa de comunicación para consultarse mutuamente durante las crisis y coordinar respuestas a desafíos regionales y amenazas comunes.
También se comprometieron a llevar a cabo ejercicios militares conjuntos de manera anual y a compartir información en tiempo real sobre los lanzamientos de misiles por parte de Corea del Norte antes de finales de 2023. Estos compromisos marcan un importante avance en las relaciones entre las tres naciones.
La postura adoptada hacia China en el comunicado conjunto es más contundente de lo esperado, especialmente considerando que tanto Corea del Sur como Japón son importantes socios comerciales de China.
En el documento se señala que rechazan cualquier intento unilateral de cambiar el statu quo en las aguas del Indo-Pacífico y se oponen enérgicamente al comportamiento agresivo de China en el Mar de China Meridional.
El encuentro en Camp David entre Biden, el presidente surcoreano Yoon Suk Yeol y el primer ministro japonés Fumio Kishida también representa un hito significativo en las relaciones entre Corea del Sur y Japón.
Ambos países han tenido una larga historia de desconfianza y acrimonia mutua.
Biden destacó la importancia histórica de este encuentro y expresó su satisfacción por los resultados alcanzados.
Se refirió a esta etapa como una "nueva era" para los tres países y calificó la reunión como excelente.
Esta cumbre marca un paso importante hacia la unidad y la cooperación en la región Asia-Pacífico en respuesta al creciente poder de China y a las amenazas nucleares de Corea del Norte.
Además, demuestra el compromiso de Estados Unidos de fortalecer sus alianzas en la región y hacer frente a los desafíos comunes.
La comunidad internacional estará atenta a los avances y resultados de esta nueva colaboración entre Estados Unidos, Corea del Sur y Japón en los próximos años.