China ha decidido eliminar los aranceles impuestos a la cebada australiana, poniendo fin a una disputa de tres años y abriendo paso a la eliminación de restricciones comerciales. Esta medida podría suponer un alivio de hasta 20 mil millones de dólares en sanciones comerciales, ya que las autoridades australianas ahora apuntan a los aranceles que han afectado la exportación de vino durante más de dos años.
En un comunicado publicado el viernes, el Ministerio de Comercio de China anunció su decisión de poner fin a los aranceles de hasta el 80 por ciento sobre el comercio de cebada australiana, tras una solicitud de la Asociación de la Industria del Vino de China.
El primer ministro Anthony Albanese celebró esta decisión como un resultado positivo después de meses de negociaciones con funcionarios chinos.
Afirmó que el comercio representa uno de cada cuatro empleos en Australia y que su gobierno siempre buscará la cooperación, pero también se mantendrá firme en la defensa de los intereses nacionales.
El ministro de Comercio, Don Farrell, expresó su confianza en que este caso siente un precedente para la eliminación de las restricciones comerciales restantes impuestas por China a las exportaciones australianas.
Según Farrell, esto representa un paso positivo hacia la normalización del comercio bilateral entre ambos países.
La cebada australiana es principalmente utilizada en la producción de alimentos para animales y de cerveza en China.
Esta medida beneficia a los productores australianos, quienes ahora podrán reanudar sus exportaciones a uno de sus mayores mercados.
Además de la eliminación de aranceles, esta noticia también representa un avance en las relaciones entre China y Australia, que habían alcanzado mínimos históricos debido a esta disputa comercial.
Ahora, se abre la posibilidad de resolver otras tensiones comerciales y promover la cooperación económica entre ambos países.