China ha condenado la reciente visita del vicepresidente de Taiwán a Estados Unidos, acusándolo de ser un separatista y un agitador, y ha anunciado medidas para proteger su soberanía.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de China condenó el pasado domingo la breve visita a Estados Unidos del vicepresidente de Taiwán, William Lai, calificándolo como un separatista y un agitador por completo.
En un comunicado emitido poco después de la llegada de Lai a Nueva York en un vuelo programado desde Taipei, el Ministerio de Relaciones Exteriores de China declaró su oposición a cualquier forma de visita de los 'separatistas de la independencia de Taiwán' a Estados Unidos.
China, que reclama Taiwán, gobernado democráticamente, como su propio territorio, ha denunciado repetidamente el viaje de Lai, que incluye también una escala en San Francisco el miércoles en su camino de regreso a Taipei.
Taiwán es la 'base de los intereses principales de China' y los hechos han demostrado una y otra vez que la razón del aumento de las tensiones en el Estrecho de Taiwán es el intento de Taiwán de 'depender de Estados Unidos para buscar la independencia', afirmó el Ministerio.
China está siguiendo de cerca los acontecimientos y tomará medidas enérgicas para defender la soberanía nacional y la integridad territorial.
China tiene una aversión especial hacia Lai, quien se ha autodenominado anteriormente como un 'trabajador práctico para la independencia de Taiwán', aunque ha afirmado repetidamente durante la campaña electoral que no busca cambiar el statu quo, sino que solo el pueblo de Taiwán puede decidir su futuro.