La Corte Suprema de Brasil ha ratificado la sentencia de 27 años de cárcel contra el expresidente Jair Bolsonaro por su implicación en actos golpistas. La decisión ahora solo depende de determinar dónde cumplirá su condena, mientras su salud y antecedentes generan controversia.
La decisión de la máxima instancia judicial implica que Bolsonaro permanece sentenciado, pero aún falta determinar en qué tipo de instalación cumplirá su condena.
Este proceso legal llegó a su fin después de que la defensa del expresidente decidiera no presentar nuevas apelaciones, habiendo tenido hasta el pasado lunes para hacerlo.
Los primeros recursos presentados por su equipo legal fueron rechazados de forma unánime por los cuatro magistrados de la Primera Sala, responsable de revisar el caso.
La ratificación de la condena fue anunciada cuatro días después de que Bolsonaro, que actualmente se encontraba en prisión domiciliaria por incumplir medidas cautelares, fuera trasladado a dependencias de la Policía Federal.
Este traslado ocurrió tras un intento de Bolsonaro de dañar una tobillera electrónica utilizada para monitorear sus movimientos.
La cuestión ahora que está en manos del tribunal es decidir cuál será el lugar de reclusión del expresidente. Según expertos, una opción sería la misma sede de la Policía Federal en Brasilia, donde Bolsonaro ocupa una sala de apenas 12 metros cuadrados, o bien una celda especial en el Complejo Penitenciario de Papuda, también en Brasilia.
La decisión ha generado diversas opiniones, especialmente considerando el estado de salud del exmandatario.
Presuntamente, Bolsonaro ha tenido problemas de salud relacionados con una grave herida que sufrió en 2018 durante la campaña electoral, la cual le ha provocado múltiples cirugías y complicaciones.
Durante los últimos días, Bolsonaro ha manifestado que su intento de dañar la tobillera fue producto de un episodio de paranoia y alucinaciones, atribuidos a los efectos de medicamentos que toma para tratar una depresión y otros problemas de salud mental.
El exmandatario negó que su acción tuviera como objetivo una fuga de prisión
En una declaración ante un juez, el exmandatario negó que su acción tuviera como objetivo una fuga de prisión.
Supuestamente, Bolsonaro, de 70 años, sufre de crisis de ansiedad, episodios de hipo y vómitos frecuentes, síntomas que él mismo relaciona con la grave herida abdominal que sufrió en 2018, tras la cual ha pasado varias veces por el quirófano.
Debido a su estado de salud y edad, sus abogados han adelantado que, en caso de que la condena quede firme, solicitarán nuevamente el beneficio de la prisión domiciliaria, argumentando que su condición requiere un trato humanitario.
La decisión de la Corte también afecta a otros dos individuos vinculados con el intento de impedir la investidura del actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva en 2022.
Entre ellos está el diputado Alexandre Ramagem, condenado a 16 años y que supuestamente huyó a Estados Unidos hace dos meses, y Anderson Torres, exministro de Justicia, quien recibió una condena de 24 años.
Este caso ha generado un gran impacto en #Brasil y en la región, ya que supuestamente marca un precedente en la #justicia contra expresidentes por acciones que supuestamente amenazaron la estabilidad democrática del país.
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