El Primer Ministro belga, Alexander De Croo, anuncia que buscará la ayuda de expertos en extremismo del gobierno luego de una serie de incendios en escuelas. Las autoridades creen que los ataques están relacionados con un polémico programa de educación sexual. De Croo habló después de que una sexta escuela en la región francófona de Valonia fue incendiada. Según las autoridades, se encontraron pancartas que protestaban contra el programa conocido como Evras en algunas de las escuelas. Aunque nadie ha reclamado la responsabilidad de los ataques, el Primer Ministro belga, Alexander De Croo, dice que consultará a expertos en extremismo.

El programa consiste en cuatro horas de formación obligatoria para estudiantes de entre 11 y 12 años y de 15 a 16 años, con el objetivo de ayudarles a desarrollar su vida relacional y sexual.

El programa llevaba años disponible para todos los grupos de edad, pero no era obligatorio hasta ahora.

"En una democracia como la nuestra, nunca permitiremos que nuestras escuelas sean un objetivo", afirmó De Croo.

"Vivimos en un país de tolerancia, y la tolerancia significa que podemos tener un debate, diferentes puntos de vista, pero nunca puede llevar a la violencia, especialmente en lugares frecuentados por nuestros hijos".

La Ministra del Interior, Annelies Verlinden, pidió poner fin a los ataques.

"No tocamos nuestras escuelas", dijo Verlinden durante una conferencia de prensa con De Croo.

"Es una línea roja".

De Croo dijo que ha pedido al organismo encargado de procesar la inteligencia sobre "terrorismo, extremismo y radicalización" que analice la situación, y Verlinden dijo que ha pedido a la policía federal que brinde apoyo a las fuerzas locales en la región afectada.

Hasta el momento, nadie ha reclamado la responsabilidad de los incendios en las seis escuelas, ni se ha arrestado a ningún sospechoso.

Este año, alrededor de 100,000 estudiantes en la federación Valonia-Bruselas están obligados a asistir a las dos sesiones de formación, lo que totaliza cuatro horas.

También se han organizado protestas, en las que participaron unas pocas cientos de personas, en Bruselas.

Además de los datos mencionados en el texto, se ha observado un aumento en la seguridad de las escuelas y se han tomado medidas adicionales para proteger a los estudiantes y garantizar su bienestar durante este difícil período.