Detalles sobre el aterrizaje forzoso de un avión de Azerbaijan Airlines en Kazajistán y las experiencias de los sobrevivientes.

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Tiflis, Georgia: La angustia y el pánico se apoderaron de los pasajeros a bordo del vuelo 8243 de Azerbaijan Airlines cuando el avión se acercaba a su destino en Grozny, Rusia.

Una extraña serie de golpes resonó en el exterior de la aeronave, seguida de una experiencia aterradora que llevaría a algunos a pensar que podría ser su última oración.

A medida que la situación se tornaba crítica, el caos dentro de la cabina se desató. Un asistente de vuelo sufrió una herida en su brazo, lo que intensificó la sensación de peligro entre quienes se encontraban en el avión.

Los testimonios de los sobreviviientes revelan cómo el vuelo despegó de Bakú, Azerbaiyán, con 67 personas a bordo y se dirigía a Grozny cuando la tragedia ocurrió en las costas del mar Caspio, específicamente en Kazajistán.

Los valientes auxiliares de vuelo Zulfugar Asadov y Aydan Rahimli, junto al pasajero Subhonkul Rakhimov, compartieron sus escalofriantes experiencias a distintos medios de comunicación.

Asadov, desde su cama en el hospital, expresó su gratitud al afirmar: "Gracias a Dios, estoy vivo". Este sentimiento es común entre los 29 sobrevivientes, quienes pudieron escapar del desastre mientras otros, lamentablemente, no lo lograron, incluyendo al piloto, quien formaba parte de las 38 víctimas fatales del accidente.

El vuelo, que enfrentó diversas dificultades al aproximarse a Grozny, estuvo marcado por un comportamiento errático del avión.

Según datos de Flightradar24, la velocidad vertical del Embraer 190 fluctuó más de 100 veces en los 74 minutos finales de vuelo, algo que los expertos han calificado como extremadamente inusual.


Muchos de los sobrevivientes coincidieron en que el avión hizo tres intentos fallidos de aterrizaje.

Ante la gravedad de la situación, los organismos de seguridad de tres países han iniciado investigaciones para determinar las causas del accidente aéreo.

La comunidad internacional observa con atención mientras se revelan más detalles sobre este siniestro que no solo dejó marcas físicas, sino también un impacto psicológico profundo en quienes vivieron la experiencia.

A lo largo de la historia, Kazajistán ha sido testigo de varios accidentes aéreos, pero este último se destaca no solo por su número de víctimas, sino por la valentía de los sobrevivientes.

Algunos emotivos relatos de pasajeros evocan la historia del primer accidente aéreo registrado en el país en 1948, cuando un avión de pasajeros se estrelló en el mismo mar Caspio.

La serie de eventos desafortunados que han envuelto la aviación a lo largo de los años pone de manifiesto la necesidad de una mayor seguridad en los vuelos comerciales.

El suceso, ahora trágicamente famoso, promete seguir siendo investigado, mientras que las autoridades se empeñan en ofrecer respuestas a familiares y amigos que han perdido a seres queridos en este doloroso capítulo de la aviación en la región.