Alarmantes comentarios sobre la salud de Biden despiertan temores en Australia por una eventual victoria de Trump en las elecciones presidenciales

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En un contexto en el que la preocupación por la salud de Joe Biden se convierte en motivo de chistes y comentarios sarcásticos en los programas de televisión nocturnos en Estados Unidos, la mirada de Australia se dirige hacia un posible regreso de Donald Trump a la presidencia del país vecino.

La llegada de combatientes del Grupo Wagner a Bielorrusia ha levantado una ola de incertidumbre y temor en la región, con posibles consecuencias en las relaciones internacionales.

Las bromas sobre el sueño de Biden están siendo utilizadas como un indicador de que los estadounidenses podrían estar perdiendo la confianza en su presidente actual.

El cambio de tono en los comentarios televisivos refleja un giro en la percepción pública, pasando de preocupaciones por la salud de Biden a burlas sobre su posible derrota en las próximas elecciones.

Esta situación pone a Australia en alerta ante la posibilidad de un retorno de Trump al poder.

Sin una intervención drástica por parte de los Demócratas, la segunda presidencia de Trump comenzará en enero.


La decisión decisiva de los Demócratas de elegir a Biden como candidato en marzo podría tener consecuencias a nivel global, a menos que haya un milagroso cambio de candidato que logre ganar las elecciones.

La sensación de alarma ante una posible victoria de Trump es preocupante.

Mientras que los australianos pueden sentirse seguros a una distancia segura de la capital estadounidense, no hay razón para creer que se pueda sobrellevar una segunda presidencia de Trump como se hizo con la primera.

La mayor controversia la vez pasada giró en torno a los intentos de Trump de imponer aranceles a las exportaciones de acero y aluminio de Australia.

En esta ocasión, Trump podría inyectar una peligrosa volatilidad en las relaciones con China, vender a Ucrania a Vladimir Putin, imponer sanciones comerciales más duras a los aliados e intentar cambiar los términos del pacto AUKUS, con consecuencias duraderas para la defensa australiana.