En Australia, varias familias se encuentran atrapadas en Nueva Caledonia y se ven en la necesidad de racionar alimentos mientras esperan encontrar una manera de salir de esta problemática isla del Pacífico, tras disturbios que han dejado cinco personas fallecidas, según relató Joanne Elias, una viajera de Sydney.

"Definitivamente los niños tienen hambre porque no tenemos muchas opciones de qué alimentarlos", comentó Elias desde un resort en la capital Noumea, donde su familia ha estado refugiada desde que comenzaron los disturbios esta semana.

Se puede notar que se están quedando sin comida", dijo a Reuters por teléfono, refiriéndose al resort donde se encuentran hospedados.

Los disturbios han sido provocados por la indignación entre el pueblo indígena Kanak por un nuevo proyecto de ley, adoptado por los diputados en París, que otorga a los franceses que hayan vivido en Nueva Caledonia durante al menos 10 años el derecho a votar.

Australia investiga objeto del tamaño de un coche que apareció en una playa remota

Las autoridades de Australia están investigando un objeto cilíndrico del tamaño de un coche pequeño que apareció en una playa remota para determinar si se trata de un fragmento espacial o basura espacial de un cohete extranjero. El objeto fue descubierto el domingo pasado en la playa de Green Head, al oeste de Australia. La Agencia Espacial Australiana está colaborando con otras agencias espaciales para identificar el objeto, que parece estar hecho en parte de un material tejido.

Tres noches de disturbios han resultado en negocios quemados, autos incendiados, tiendas saqueadas y barricadas en las carreteras, cortando el acceso a medicinas y alimentos.

Un policía se encuentra entre los fallecidos.

Cientos de refuerzos policiales franceses comenzaron a llegar al territorio bajo dominio francés el viernes en un intento por recuperar el control de la capital.

Los autos quemados se alinean después de los disturbios que estallaron tras las protestas por las reformas electorales en Noumea, Nueva Caledonia.

Elias, quien llegó al país el 10 de mayo con su esposo y cuatro hijos, dijo que les habían dicho que llenaran una bañera en caso de que se terminara el agua, ya que las existencias de alimentos disminuían.

"No sabemos cuánto tiempo vamos a estar aquí", dijo, agregando que su familia se encontraba entre aproximadamente 30 australianos atrapados en el resort Chateau Royal.