Los resultados de un referéndum en Australia muestran el rechazo de los ciudadanos a incluir una voz indígena en la Constitución del país. Esta decisión ha generado atención global sobre la situación de los aborígenes y su relación con el gobierno federal. Expertos en derechos humanos de la ONU habían instado a los australianos a votar a favor, argumentando que esto ayudaría a superar la discriminación sistemática y las desigualdades que enfrentan los pueblos indígenas.

Imagen relacionada de australia rechaza propuesta voz indigena

Australia ha rechazado enérgicamente la propuesta de incluir una voz indígena en el Parlamento, según los resultados de un referéndum reciente.

Este rechazo ha generado titulares alrededor del mundo y ha puesto en relieve la difícil e incluso 'malhumorada' campaña que rodeó al referéndum.

El resultado de rechazo por parte de todos los estados y aproximadamente seis de cada diez votantes ha puesto la atención global sobre la difícil situación de los aborígenes y torres estrechas y su relación con las generaciones de gobiernos federales.

Expertos en derechos humanos de las Naciones Unidas en Ginebra habían instado a los australianos a votar a favor, argumentando que esto 'allanaría el camino para superar el legado colonial de la discriminación y las desigualdades sistemáticas' que han socavado la capacidad de los pueblos indígenas para lograr sus derechos al desarrollo y la autodeterminación.

En el Reino Unido, el Financial Times informó que los partidarios de la voz prometieron que la inclusión de los pueblos indígenas en la Constitución uniría a Australia y abriría una nueva era.

Dicho periódico también señaló que los líderes del No describieron la idea como divisiva, ya que crearía 'clases' especiales de ciudadanos en las que algunos serían más iguales que otros.


'El fracaso de este referéndum de alto perfil, que había sido respaldado por algunas de las mayores empresas e instituciones de Australia, representa un revés en los intentos del país de lidiar con su pasado y presente tratamiento de sus habitantes nativos, que representan el 3% de la población', señaló el artículo.

La BBC informó que Australia había rechazado abrumadoramente un plan para otorgar mayores derechos a los pueblos indígenas en una 'campaña a menudo ácida' basada en 'información equivocada sobre los efectos del plan'.

Por su parte, The Times calificó este rechazo como 'un golpe devastador' para aquellos que veían en la voz indígena una oportunidad única para cerrar la brecha que persiste entre los aborígenes australianos y el resto de la población.

'A pesar de numerosas iniciativas de los gobiernos sucesivos y miles de millones de dólares de inversión, los jóvenes aborígenes tienen más probabilidades de ir a prisión que a la universidad, y se espera que los indígenas mueran entre ocho y nueve años antes que los no indígenas', destacó el medio de comunicación.