La duna de seguridad en la playa de Riazor se levantará para proteger el Paseo Marítimo de temporales durante el invierno.

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En La Coruña, Galicia, el Ayuntamiento local dará inicio el próximo lunes 21 de octubre a los trabajos de construcción de una duna en la playa de Riazor, la cual servirá como barrera para proteger el Paseo Marítimo de los posibles temporales costeros que se puedan presentar durante la próxima temporada invernal.

La empresa encargada de esta labor utilizará maquinaria especializada para realizar los trabajos, que se llevarán a cabo a lo largo de la semana siguiente.

El Gobierno, liderado por Inés Rey, ha decidido implementar estas medidas con el objetivo de garantizar la seguridad de las personas y de las infraestructuras en los meses de invierno, cuando los fenómenos meteorológicos tienden a ser más intensos.

La duna, cuyo diseño superará los dos metros de altura, será ubicada en la zona intermedia de la playa, manteniendo una distancia de seguridad con respecto al Paseo Marítimo.

Este tipo de obras se realizan anualmente en un esfuerzo por reducir el impacto de los fenómenos costeros en el tráfico y en los elementos cercanos a la costa.

La concejala de Medio Ambiente, Yoya Neira, hizo hincapié en que durante los próximos seis meses el personal municipal llevará a cabo revisiones continuas de esta estructura.

Esto será para prever y planificar posibles reforzos según sea necesario, dependiendo de los temporales y otros fenómenos relacionados con el clima.

Es interesante recordar que la duna de Riazor fue levantada por primera vez en el año 1995 como resultado de un fuerte temporal que destruyó la antigua balaustrada del Passeo Marítimo en esta área.

Este tipo de situaciones meteorológicas se presenta en promedio entre una y tres veces al año, lo que hace evidente la importancia de medidas como esta.

La existencia de la duna en Riazor está programada hasta mediados de mayo del próximo año, momento en el cual será desmontada para preparar las playas para la temporada de baño, que comenzará oficialmente el 15 de junio de 2025. De este modo, las autoridades buscan equilibrar la seguridad con el disfrute turístico y recreativo de una de las playas más populares de la región.

La conservación del medio ambiente y la protección de las infraestructuras costeras son fundamentales en los planes de desarrollo y mantenimiento del litoral gallego.