El Ayuntamiento de La Coruña ha aprobado un plan para incorporar más de 4.100 nuevos contenedores de basura, financiados con fondos europeos, con el objetivo de mejorar el sistema de recogida y fomentar la separación en origen.
La Xunta de Goberno aprobó la licitación para un contrato de suministro que permitirá la adquisición de más de 4.100 nuevos contenedores destinados a la recogida de basura, en su mayoría de capacidad elevada y equipados con tecnologías avanzadas. Esta iniciativa forma parte de un plan estratégico para incrementar la eficiencia en la recolección y fomentar la separación en origen de los residuos, especialmente los #residuos orgánicos.
De estos contenedores, 650 serán de 1.800 litros, con apertura lateral y sistemas electrónicos de cierre y control automático de capacidad. Estos avances tecnológicos facilitarán la gestión de residuos y disminuirán la dispersión del plástico y otros desechos en la vía pública. Los otros 3.500 contenedores, de carga trasera y capacidad menor, están destinados específicamente a la recogida domiciliaria de biorresiduos, con el fin de potenciar la compostaje y reducir la cantidad de residuos enviados a los vertederos.
El contrato, valorado en aproximadamente 2,2 millones de euros (unos 2,4 millones de dólares o 2,1 millones de libras esterlinas), cuenta con financiación procedente de fondos europeos, en línea con las políticas de #sostenibilidad y economía circular fomentadas por la Unión Europea.
Además, el Ayuntamiento prevé en fases posteriores sumar a este proyecto la adquisición de mini-puntos limpios para facilitar a los vecinos la separación de residuos especiales y reciclables, optimizando así toda la cadena de gestión.
Este esfuerzo por modernizar la infraestructura de residuos no es solo un paso hacia la sostenibilidad, sino también una continuación de la historia de #La Coruña en impulsar políticas verdes.
La ciudad ha avanzado en programas de reciclaje y reducción de residuos
Desde la década de 1990, la ciudad ha avanzado en programas de reciclaje y reducción de residuos, logrando la acreditación de varias certificaciones ambientales.
La incorporación de más de 4.100 contenedores se suma a importantes inversiones en el pasado, como la renovación de las plantas de tratamiento y campañas de sensibilización ciudadana.
Por otro lado, en materia urbanística, el Ayuntamiento ha concedido permisos para la construcción de 45 nuevas viviendas en la calle Rolda de Outeiro, en un proyecto que prevé una inversión de aproximadamente 4,2 millones de euros (cerca de 4,6 millones de dólares).
Este desarrollo inmobiliario responde a la necesidad de aumentar el parque de viviendas en un contexto de crecimiento poblacional y demanda por ofrecer opciones accesibles y sostenibles.
Asimismo, se ha dado luz verde a la rehabilitación de los edificios 46 y 48 en la calle Orzán, que actualmente se encuentran en estado de abandono.
La recuperación de estos inmuebles, que estaban en ruinas debido a la inacción de sus propietarios, permitirá su transformación en viviendas residenciales, contribuyendo a la revitalización del centro histórico de La Coruña.
La administración local ha especificado que estas acciones forman parte de su estrategia de rehabilitación urbana, que busca no solo mejorar la apariencia de la ciudad, sino también fomentar la creación de empleo y residencias en zonas tradicionales.
