En la ciudad de La Coruña, situada en Galicia, la concejala de Bienestar Social, Participación e Igualdad, Nereida Canosa, informó esta mañana sobre los temas aprobados por la Xunta de Gobierno Local.

Entre los puntos más destacados se encuentra la aprobación del proyecto correspondiente a la segunda fase de reurbanización del grupo de viviendas de María Pita, en el barrio de Labañou.

Este ambicioso plan de remodelación forma parte de un Programa de Rehabilitación Integral (ARI) que se divide en cinco fases, con la primera ya concluida a principios de este año.

Esta primera etapa incluyó mejoras en el espacio interior delimitado por la avenida de Labañou, un tramo de la ronda de Outeiro y el bloque de viviendas accesible desde la calle Tomás Fábregas.

Con la segunda fase, el Concello se enfoca en implementar numerosos mejoras a lo largo de la calle Tomás Fábregas, así como en sus intersecciones con la avenida de Labañou y la ronda de Outeiro.

La concejala Canosa destacó la necesidad imperante de enriquecer estos espacios públicos con más árboles y zonas verdes, así como fomentar áreas de recreo y pasajes peatonales más accesibles.

También se propondrá la implementación de medidas que faciliten el acceso a las viviendas, eliminando obstáculos y atendiendo a las demandas de los vecinos a través de un escucha activa de sus necesidades y sugerencias.

Una de las innovaciones que se incorporará es la conformación de una plataforma única en la calle Tomás Fábregas, que contará con pavimentos diferenciados para señalar la calzada y los espacios peatonales.

Esta plataforma incluirá un carril de tres metros de ancho para el tránsito de vehículos, el cual tendrá un límite de velocidad de 20 kilómetros por hora dentro de esta urbanización.

"Apostamos por una convivencia armónica en términos de movilidad, priorizando siempre al peatón en este espacio residencial, donde la reducción de la velocidad del tráfico es esencial para la seguridad de nuestros vecinos", enfatizó Nereida Canosa en la rueda de prensa posterior a la sesión.

El proyecto también contempla mejoras para facilitar el acceso a varios bloques de viviendas en la calle Tomás Fábregas.

Se está evaluando la posibilidad de instalar mini ramps que ayudarán a superar las pendientes existentes en algunos tramos de la calle.

Además, se analizará la viabilidad de cada edificio para permitir en el futuro la instalación de ascensores, facilitando así la movilidad de todos los habitantes.

Por otra parte, el Concello planea incrementar la vegetación y plantar árboles en diferentes secciones de la calle Tomás Fábregas, reconociendo que este aspecto presenta un margen considerable de mejora según los últimos estudios realizados.

"El objetivo del Gobierno de Inés Rey es embellecer nuestro paisaje urbano, y eso implica tomar medidas como estas aprovechando los espacios públicos disponibles en las calles", añadió la concejala.

En complementario, se espera aprovechar los senderos peatonales del sector norte de Tomás Fábregas para crear más áreas verdes y varias zonas de ocio para los residentes.

Una de las iniciativas previstas es la demolición del antiguo depósito de aguas ubicado en la calle, con la intención de habilitar allí un nuevo espacio de esparcimiento para todos los vecinos.

Además, en el marco de este proyecto se contempla el soterramiento de las instalaciones eléctricas y de telecomunicaciones que, en la actualidad, todavía recorren las fachadas de muchas viviendas.

Esto se sumará a la renovación integral de la red municipal de saneamiento en Tomás Fábregas, la cual será adaptada a los estándares de seguridad contemporáneos y se optimizará para una recolección y separación de aguas más eficientes.

También se mejorarás la red de iluminación, reemplazando las antiguas lámparas por nuevas de tecnología LED.