Recientemente, La Coruña ha inaugurado nuevos tramos de carril bici en Novo Mesoiro y en el istmo de la Pescaría, reforzando su compromiso con la movilidad sostenible. Estos nuevos recorridos suman a una red de más de 53 kilómetros en la ciudad.
En la ciudad de La Coruña, Galicia, el Ayuntamiento ha puesto en marcha recientemente nuevos tramos de carril bici en los barrios de Novo Mesoiro y el istmo de la Pescaría.
Estas intervenciones representan un avance significativo en el ambicioso plan del equipo de gobierno liderado por Inés Rey, que busca integrar los recorridos ciclables de la ciudad.
En la actualidad, La Coruña cuenta con una red de más de 53 kilómetros que fomenta el uso de la bicicleta como medio de transporte sostenible.
El carril bici de Novo Mesoiro, el primero construido en este barrio, ha sido diseñado para ofrecer un recorrido bidireccional que conecta la calle Illas Sisargas con la rotonda que se encuentra en la intersección de la carretera DP-0512. Este desarrollo ha sido posible gracias a la instalación, a mediados del año pasado, de una estación de BiciCoruña, que proporciona servicios de alquiler de bicicletas en Novo Mesoiro.
Simultáneamente, en este último trimestre del año, se ha desarrollado otro tramo de carril bici que enlaza los Cantones con el paseo marítimo, cerca de la playa del Orzán.
Este nuevo recorrido es el primero que atraviesa el barrio de la Pescaría, comenzando en la calle Nova, pasando por la calle Alta, y finalizando en el cruce con la calle Socorro y la avenida Pedro Barrié de la Maza.
Ambas iniciativas incluyen una inversión total superior a 230.000 euros (aproximadamente 192.000 euros), lo que subraya el compromiso del gobierno municipal con políticas de movilidad sostenible.
Estas acciones no solo buscan reducir la dependencia de los vehículos privados, sino también contribuir a la lucha contra el cambio climático.
La concejala de Infraestructuras y Movilidad, Noemí Díaz, destacó en una reciente rueda de prensa que solo en el último año, el servicio municipal BiciCoruña ha evitado la emisión de más de 600 toneladas de CO2 a la atmósfera, lo que representa un beneficio considerable para la salud ambiental de la ciudad.
La Coruña, reconocida por su belleza natural y su rica historia, ha adoptado en los últimos años diversas iniciativas para promover modos de transporte respetuosos con el medio ambiente.
Esto se enmarca dentro de un contexto en el que muchas ciudades de España están buscando transformar sus infraestructuras y hábitos de movilidad.
La integración de los carriles bici no solo facilita la circulación de bicicletas, sino que también fomenta un estilo de vida más activo y saludable para sus habitantes, al tiempo que se mejora la calidad del aire y se abordan los desafíos ambientales actuales.
Durante décadas, la ciudad ha mostrado su interés por despegar en términos de sostenibilidad y estos nuevos desarrollos son una prueba más de este compromiso.
La expansión de la red de carriles bici contribuirá a crear una ciudad más habitable y amigable tanto para los residentes como para los visitantes.