El Concello de La Coruña, a través de Emalcsa, realiza mejoras en el depósito de aguas de Eirís, reforzando su seguridad estructural y asegurando el suministro de agua potable a la comunidad.

El Concello de La Coruña, en Galicia, ha iniciado recientemente trabajos cruciales en el mantenimiento del depósito elevado de aguas de Eirís, una acción que busca garantizar la seguridad estructural de esta infraestructura esencial.

Esta intervención es parte de un programa de mantenimiento que se lleva a cabo después de realizar inspecciones periódicas en el propio depósito.

Las evaluaciones de la red de distribución de agua son imprescindibles y permiten obtener una visión clara de las necesidades relacionadas con el mantenimiento tanto preventivo como correctivo.

Esto es fundamental para abordar no solo deficiencias puntuales, sino también problemas que puedan afectar a las estructuras de forma más general, ya sea debido a la erosión de los materiales o a su exposición a condiciones climáticas adversas.

En el caso concreto de La Coruña, las evaluaciones realizadas por Emalcsa se han centrado en los depósitos elevados de Eirís y Vixía, donde se prevé una inversión de cerca de 500,000 euros (aproximadamente 420,000 euros) para implementar mejoras que refuercen la integridad de ambas estructuras.

Los trabajos en el depósito de Eirís ya han comenzado, habiendo instalado las estadas necesarias alrededor de la base de dicha instalación.

Por otro lado, el depósito de Vixía también requerirá atención, y se espera que las obras se realicen en la primavera de 2025, un período que ofrece mejores condiciones climáticas en comparación con el invierno, lo que facilitará el desarrollo de las obras.

Tanto el depósito elevado de Eirís como el de Vixía son elementos clave dentro de la red municipal de abastecimiento de agua, siendo fundamentales para el funcionamiento adecuado del sistema de distribución.

Este sistema es el responsable de asegurar el suministro de agua potable a todos los ciudadanos de La Coruña, un recurso indispensable para la vida diaria.

Es importante destacar que la infraestructura de agua potable en La Coruña ha avanzado significativamente a lo largo de los años.

Históricamente, la ciudad ha enfrentado desafíos relacionados con el abastecimiento de agua, lo que ha llevado a la necesidad de implementar tecnologías y estrategias de gestión más modernas.

La inversión continua en el mantenimiento y mejora de estas instalaciones no solo aumenta la seguridad hídrica, sino que también garantiza el bienestar de la población.

Este tipo de mantenimiento no es solo una responsabilidad municipal, sino un compromiso con el futuro de la comunidad, asegurando que todos los residentes tengan acceso a agua de calidad y que infraestructuras tan vitales como los depósitos de agua sean capaces de soportar el paso del tiempo.