La alcaldesa de La Coruña y la presidenta de la Asociación de Sordos presiden la lectura del manifiesto en conmemoración del Día Nacional de las Lenguas de Signos.
En La Coruña, Galicia, la alcaldesa Inés Rey y la presidenta de la Asociación de Sordos, Mª Carmen Monelos Suárez, presidieron la lectura del manifiesto en conmemoración del Día Nacional de las Lenguas de Signos, celebrado esta mañana en María Pita, una década después de que se estableciera la efeméride.
En el acto también participaron Diego Fernández Álvarez, socio de Aspesor; Roberto Couñago, intérprete de lengua de signos, junto con socios, colaboradores y familias vinculadas a la asociación.
También estuvo presente la concejala del Área de Bienestar Social, Yoya Neira, junto con otros miembros de la corporación.
Rey reivindicó la necesidad de que la lengua gallega también sea reconocida en el sistema de lenguas de signos, al igual que el catalán y el español.
Recordó que en el pasado mandato, con la renovación del registro, el Ayuntamiento habilitó un sistema de ayuda e interpretación en lengua de signos con el objetivo de que las personas sordas puedan realizar los trámites administrativos en igualdad de condiciones.
La lengua de signos es un medio de comunicación visual-simbólico que se utiliza por las personas sordas para poder comunicarse entre sí y con personas oyentes.
Surge como una necesidad de inclusión y accesibilidad para las personas con discapacidad auditiva, permitiéndoles expresarse y comprender su entorno de una manera más eficaz.
En Galicia, la lengua de signos gallega ha ido ganando visibilidad y reconocimiento en los últimos años, gracias al trabajo de asociaciones como Aspesor y a la labor de sensibilización realizada por distintas instituciones públicas.
La conmemoración del Día Nacional de las Lenguas de Signos es un recordatorio de la importancia de garantizar el derecho de todas las personas a comunicarse y ser comprendidas, independentemente de su capacidad auditiva.
Es fundamental que la sociedad en su conjunto tome conciencia de la importancia de la inclusión y la diversidad, promoviendo entornos accesibles y respetuosos con las diferentes formas de comunicación.
La diversidad lingüística es un valor que enriquece nuestra sociedad y que debe ser preservado y protegido.
La celebración de días como el Día Nacional de las Lenguas de Signos es una oportunidad para reflexionar sobre la importancia de garantizar los derechos y la igualdad de oportunidades para todas las personas, independientemente de sus capacidades y características individuales.