En La Coruña, Galicia, el Concello ha llevado a cabo una reunión en la mañana de este miércoles, en la cual se presentó a los vecinos y vecinas de las Casas de Franco la adaptación del proyecto de reforma del entorno.

Este es un compromiso que asumió la alcaldesa, Inés Rey, en el que se ha tenido en cuenta las solicitudes y demandas de la comunidad local.

La viceportavoz del Gobierno, Nereida Canosa, y el concejal de Urbanismo y Rehabilitación, Francisco Díaz Gallego, fueron los encargados de exponer esta nueva formulación del plan urbanístico.

Los vecinos dieron su visto bueno, indicando que se habían considerado adecuadamente las nuevas peticiones que habían planteado.

El plan reformulado responde a las solicitudes vecinales y se centrará en implementar una cota cero en toda la superficie de actuación.

Un cambio significativo con respecto al proyecto original es la decisión de no incluir ni la pérgola ni la marquesina que estaban planteadas.

Este nuevo enfoque también contempla la instalación de contenedores de residuos en cada uno de los portales, facilitando así la gestión de residuos para los residentes.

Además, se tiene previsto crear nuevas plazas de aparcamiento para carga y descarga, así como para personas con movilidad reducida (PMR), junto con reservar espacio para la farmacia local.

Los vecinos se comprometieron a informar sobre esta adaptación a otros residentes de la zona, con la intención de comunicar una confirmación definitiva a principios de la próxima semana.

De acuerdo con la información proporcionada por Canosa y Díaz, el Concello tiene planes para retomar las obras este mes, comenzando con la parte correspondiente a la canalización eléctrica.

Esto representa un paso importante para la renovación de un área que ha sido objeto de atención pública y necesidades comunitarias.

Cabe mencionar que las Casas de Franco tienen una historia bastante particular dentro del contexto gallego.

Construidas en un periodo que refleja el desarrollo arquitectónico de la región, han sido parte del paisaje urbano de La Coruña durante décadas.

A lo largo del tiempo, han sido objeto de diferentes proyectos y propuestas de mejora, pero las demandas de los residentes siempre han sido la piedra angular de cualquier reforma.

La inclusión de las voces vecinales en este nuevo proyecto pone de manifiesto la importancia de la participación ciudadana en la toma de decisiones sobre la infraestructura pública.

A medida que el Concello avanza con estos planes, se espera que la nueva intervención no solo mejore la estética del entorno, sino que también proporcione mayor comodidad y funcionalidad para el día a día de los habitantes de esta área.

Al final, este proyecto reformado busca no solo embellecer el entorno, sino también cumplir con las expectativas y necesidades de la comunidad local, mostrando un ejemplo positivo de colaboración entre las autoridades y la ciudadanía.