La idea de construir un estadio multi-deportes y la incorporación de un equipo profesional de fútbol en Kingston enfrenta tanto apoyos como oposiciones por parte de la comunidad.

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En Kingston, Ontario, se ha planteado una propuesta para construir un estadio multi-deportes y atraer un equipo profesional de fútbol a la ciudad, generando tanto entusiasmo como oposición entre los residentes.

La empresa Victory Grounds Ventures (VGV) ha presentado un plan para edificar un campo de césped artificial que sería cubierto por una cúpula durante el invierno, localizándose este proyecto en el Centro Memorial, un espacio que actualmente alberga un parque acuático y una pista de atletismo.

El socio gerente de VGV, Paul Barbeau, destaca que este estadio podría significar un gran beneficio turístico para los negocios locales, además de no requerir financiamiento por parte de los contribuyentes.

"Al contrario, estoy buscando pagar a los contribuyentes a través de un contrato de arrendamiento, para que ellos mantengan la propiedad de la tierra", afirmó Barbeau.

Sin embargo, no todos están satisfechos con la idea. Muchos residentes expresan su preocupación, argumentando que el proyecto podría afectar negativamente a la calidad de vida de quienes viven a su alrededor.

Annette Burfoot, co-presidenta de la Asociación Comunitaria Williamsville, manifestó su temor a que la instalación de un estadio privado saque provecho de un espacio público, lo que alteraría el entorno y generaría molestias continuas.

La propuesta también ha puesto en el centro de atención el futuro del popular mercado de agricultores del Centro Memorial. Actualmente, este lugar es sede de un mercado durante los meses fríos, y ha habido preocupaciones de que la construcción del estadio ocasionaría la demolición de estructuras utilizadas para el mercado, reduciendo así su espacio y accesibilidad.

Un reporte de la ciudad asegura que la cancha no afectaría la área de juegos infantiles, pero los críticos del proyecto han señalado que la promesa de un mercado de agricultores que funcione durante todo el año queda como un compromiso vago, y han solicitado a los residentes firmar una petición en contra del estadio.

La petición lanzada por Burfoot ya ha acumulado más de 5,000 firmas, resaltando el descontento de muchos en la comunidad. A pesar de los puntos en contra, algunos miembros del consejo municipal, como el concejal Vincent Cinanni, han reconocido que la propuesta podría traer beneficios económicos a la ciudad y que se siente la necesidad de un campo de fútbol.

Sin embargo, Cinanni subrayó que la ubicación actual del Centro Memorial podría no ser la más adecuada para este tipo de proyecto.

Hasta el momento, el consejo de la ciudad está sopesando tres opciones: trabajar con VGV para desarrollar un contrato de arrendamiento a largo plazo, buscar otro sitio para el estadio o rechazar la propuesta de arrendamiento de propiedades que pertenecen a la ciudad.

La información aún está en fase de discusión, ya que se establece un plazo para que la VGV confirme su intención con la liga de fútbol canadiense antes de finales de marzo.

Kingston, que alberga actualmente varios eventos deportivos y culturales, se enfrenta a un momento decisivo que podría transformar su paisaje y vida comunitaria.

Los debates en torno al estadio bien podrían definir el futuro de la interacción pública y privada en este ámbito. Lo cierto es que la comunidad debe decidir si están dispuestos a abrir las puertas a un nuevo capítulo deportivo o si prefieren preservar la esencia y los usos actuales del Centro Memorial.