La selección mexicana de fútbol se enfrentará a Estados Unidos en la final de la Copa de Oro después de vencer a Honduras por 1-0 con un gol de Raúl Jiménez en la segunda mitad, en un partido disputado en Santa Clara, California.

Este logro mantiene a #México en la búsqueda de su décimo título en este torneo continental, consolidándose como uno de los equipos más exitosos en la historia de la Concacaf.
El partido fue un digno enfrentamiento en el que la selección mexicana dominó la posesión, aunque le costó crear oportunidades claras en el área rival durante la primera mitad.
Sin embargo, la constancia y el talento joven del equipo dieron frutos en la segunda parte cuando el delantero Raúl Jiménez, de 33 años y pieza clave en la selección, anotó el único gol del encuentro al minuto 50.
La jugada que permitió a México ponerse en ventaja inició con una excelente asistencia del mediocampista juvenil Gilberto Mora, de solo 16 años, quien demostró su talento con un pase preciso que Jiménez definió con un potente disparo que superó al arquero hondureño Edrick Menjivar.
Este tanto no solo elevó el ánimo del equipo mexicano, sino que también dejó en evidencia la promesa del talento joven en el #fútbol de la región.
No tardaron en llegar las chances de ampliar la ventaja, y en los minutos posteriores Mora continuó mostrando su visión de juego con una asistencia más que pudo ser gol, pero el balón fue desviado por un defensa adversario.
Por su parte, el mediocampista Edson Álvarez estuvo cerca de marcar el segundo tanto tras un desvío en una jugada de balón parado, pero su disparo fue anulado por fuera de lugar tras revisar la acción en el VAR.
Honduras intentó igualar el marcador
Durante los minutos finales, #Honduras intentó igualar el marcador, buscando aprovechar alguna contra o jugada a balón parado, pero la defensa mexicana, liderada por jugadores experimentados, supo mantener la tensión y asegurar el resultado.
El técnico de México, el argentino Diego Cocca, expresó tras el partido su satisfacción por el rendimiento del equipo: “Hemos logrado dar un paso más hacia nuestro objetivo, que es conquistar el título.
La juventud y la experiencia se complementaron bien”.
Por otro lado, Estados Unidos, anfitrión del torneo, derrotó a Guatemala por 2-1 en la otra semifinal, preparando un duelo muy esperado en la final que se disputará en el NRG Stadium de Houston, Texas, el próximo domingo.
La última vez que México ganó la #Copa de Oro fue en 2019, y aspiran a igualar o incluso superar esa marca, que los convierte en los máximos campeones del torneo junto a Estados Unidos.
Este torneo tiene un significado especial para el fútbol en Norteamérica, ya que es una oportunidad de mostrar la calidad de los equipos nacionales en una región donde el fútbol ha ido ganando terreno rápidamente en las últimas décadas.
La historia de la Copa de Oro se remonta a 1963, y México ha sido un participante constante desde sus inicios, consolidándose como uno de los equipos más representativos de la región con una tradición que se remonta a la época de la Liga Mexicana de Fútbol, fundada en 1927.
Con esta clasificación, México continúa su racha de éxito en competencias regionales y busca sumar un nuevo título que ilustre su dominio en la Concacaf, región que ha tenido grandes desafíos y también avances, en particular en comparación con el crecimiento del fútbol en Canadá y Estados Unidos.