La selección de Australia avanzó a los cuartos de final de la Copa Mundial Femenina al ganar por 2-0 contra Dinamarca en Sydney el pasado lunes.

Esta victoria asegura que las Matlidas no se conviertan en el último gran nombre en quedar eliminado, tras las eliminaciones de Estados Unidos, Alemania y Brasil.

Los goles de Caitlin Foord y Hayley Raso garantizaron el pase de las Matlidas a los cuartos de final.

El equipo co-anfitrión del torneo se enfrentará a Francia o Marruecos en Brisbane el próximo sábado.

Las aficionadas australianas empezarán a creer que su equipo puede coronarse campeón del mundo después de que la estrella del equipo, la delantera Sam Kerr, regresara de una lesión en la pantorrilla para hacer su primera aparición en el torneo.

Frente a una multitud de 75.784 espectadores en el Estadio Australia, las Matildas ya se habían puesto en camino hacia los cuartos de final cuando Kerr hizo su entrada en el minuto 80.

Foord adelantó a Australia en el minuto 29 tras recibir un pase de Mary Fowler.

Raso marcó el segundo gol en el minuto 70 después de un pase de Emily van Egmond.

La Ópera de Sydney se iluminó con los colores amarillo y verde de las Matildas mientras crecía la emoción antes del inicio.

Las aficionadas australianas temían que su equipo ni siquiera lograra pasar de la fase de grupos después de perder ante Nigeria.

Pero una victoria por 4-0 contra Canadá en su último partido del Grupo B les aseguró el primer puesto.

Sinclair falla un penalti mientras Canadá empata con Nigeria en el partido inaugural de la Copa del Mundo Femenina

Christine Sinclair, la delantera del equipo de Canadá, falló un penalti en el empate 0-0 contra Nigeria en el primer partido de la Copa del Mundo Femenina. La arquera Chiamaka Nnadozie fue clave para el equipo nigeriano al detener el tiro desde el punto penal. A pesar del resultado, el grupo queda abierto para ambos equipos.

De regreso en el Estadio Australia, donde comenzaron su campaña el 20 de julio, las Matildas aún no contaban con Kerr desde el inicio.

La delantera se lesionó la pantorrilla izquierda en la víspera del primer partido y no jugó en la fase de grupos.

A pesar de recuperarse de la lesión, fue nombrada como suplente contra Dinamarca.

Mientras Kerr esperaba en el banquillo, Australia demostró ser demasiado fuerte para Dinamarca.

El gol de Foord fue producto de un pase preciso de Fowler en su propio campo.

Foord se adelantó, recortó desde la izquierda y metió su disparo entre las piernas de la portera de Dinamarca, Lene Christensen, desatando la celebración de los aficionados.

Foord estuvo cerca de marcar un segundo gol antes del descanso, pero su disparo cruzado pasó rozando el poste con Christensen vencida.

Un taconazo de Van Egmond desde corta distancia fue luego salvado por la portera.

Pero el público celebró como si Australia hubiera marcado de nuevo cuando Kerr apareció en la pantalla grande preparándose para saltar al campo.

Pocos momentos después, Australia anotó un segundo gol después de que Fowler encontrara a Van Egmond en el área y esta le diera el pase a Raso, quien disparó bajo entre un área llena de jugadores y metió el balón en la esquina inferior.

Kerr reemplazó a Raso 10 minutos después para coronar una noche de celebraciones.