El partido de ida entre Universidad de Chile y Alianza Lima finalizó sin goles tras un encuentro lleno de decisiones polémicas y jugadas disputadas, dejando todo por definir en la segunda parte de la serie en Coquimbo.

Imagen relacionada de universidad de chile y alianza lima empatan sin goles en un resultado que deja todo abierto para la vuelta

El encuentro estuvo marcado por decisiones arbitrales controvertidas y jugadas polémicas que influyeron en el desarrollo del partido.

Desde el inicio, la #Universidad de Chile intentó aprovechar su condición de local y tomó la iniciativa en el campo. A los 6 minutos, Maximiliano Guerrero logró anotar para los estudiantiles, poniendo a su equipo en ventaja, pero la celebración fue rápidamente desvanecida tras la revisión del VAR, que anuló la anotación por posición de adelanto.

La tecnología también intervino antes del descanso para invalidar un gol de Fernando Gaibor, quien había definido tras una mano previa de Kevin Quevedo, en una decisión que generó controversia entre los hinchas.

Supuestamente, en una jugada clave a los 37 minutos, Sergio Peña cometió una mano en un tiro libre de Guerrero, que no fue sancionada por el árbitro, lo que provocó reclamos de los visitantes y aumentó la tensión en el duelo.

La segunda mitad fue de menor ritmo en términos de llegadas claras a las porterías, pero estuvo cargada de jugadas polémicas que mantuvieron a los espectadores en vilo.

Dejando a #Alianza Lima con un jugador menos en el campo

Un momento destacado ocurrió a los 63 minutos, cuando Carlos Zambrano, en una acción infantil, le propinó una falta a Charles Aránguiz que le valió la segunda tarjeta amarilla y su expulsión, dejando a Alianza Lima con un jugador menos en el campo.

Presuntamente, esta expulsión fue decisiva, ya que Universidad de Chile no logró capitalizar la ventaja numérica, repitiendo una situación similar a la que enfrentaron en la Copa Libertadores meses atrás contra Botafogo.

El partido fue disputado en un clima tenso, con las decisiones arbitrales en el centro de la polémica, y todo indica que la serie se decidirá en la revancha.

La segunda parte, aunque con menos llegadas peligrosas, mantuvo el suspenso en cada jugada y dejó abiertas todas las posibilidades para el encuentro de vuelta.

El próximo 25 de septiembre, en Coquimbo, el escenario será distinto, ya que el partido se jugará sin público debido a las restricciones sanitarias.