Se realiza un balance sobre la Operación Especial de Tráfico del Verano en Euskadi, destacando el aumento del tráfico internacional y la reducción de accidentes.

El Gobierno Vasco ha dado a conocer un primer balance de la Operación Especial Salida-Retorno del verano en Euskadi, que revela que durante los meses de julio y agosto, aproximadamente 2.030.000 vehículos cruzaron el territorio en tránsito internacional, cifra que supera las previsiones iniciales por 6.000 unidades.

El tráfico internacional ha crecido un 3,5% en comparación con el verano del año anterior, a pesar de una disminución del 18% en la siniestralidad, lo que es motivo de satisfacción para las autoridades.

Sin embargo, se reportaron siete fatalidades, un descenso respecto a los diez fallecidos de 2023. Este balance incluye un total de 1.051 accidentes, lo que significa 233 incidentes menos que en el mismo periodo del año anterior.

Este año, el total de víctimas en accidentes en las carreteras vascas se ha situado en 28.

Este aumento del tráfico ha sido más notable en la provincia de Gipuzkoa, donde los peajes de Biriatou experimentaron un gran aumento de vehículos, especialmente durante los últimos fines de semana de agosto, coincidiendo con el retorno de muchos viajeros.

Además, otros destinos cercanos como Cantabria, Burgos y Navarra también han experimentado incrementos en el tráfico, con aumentos del 2,75%, 3,25% y 2,5%, respectivamente.

El Gobierno Vasco implementó varias operativas especiales para mejorar la fluidez del tráfico, especialmente en puntos críticos como el nudo de Armiñón y los enlaces AP-1/N-622 hacia Vitoria-Gasteiz y N-622/A-1 hacia Burgos-Madrid, facilitando así el paso de los vehículos en momentos de gran afluencia.

Durante la Operación Salida, se sugirió utilizar rutas alternativas como la N-1 para evitar retenciones severas que superaron los 6 kilómetros entre La Puebla de Arganzón y el acceso a la AP-1. En Bizkaia, el tráfico pesado provocó congestiones significativas, especialmente en la A-8, donde se reportaron colas de hasta 14 kilómetros en julio.

Los dispositivos de señalización también se han optimizado para la Operación Retorno, con la finalidad de garantizar una incorporación fluida de vehículos provenientes de la autopista AP-1, evitando así demoras en el flujo vehicular.

Sin embargo, el viernes 30 de agosto, se registraron colas de 10 kilómetros en el peaje de Biriatou y en la AP-8, debido a un accidente.

A pesar del aumento del tráfico, y gracias a las medidas de prevención y control de la siniestralidad, se ha logrado reducir el número de accidentes en comparación con el verano anterior.

Es importante seguir manteniendo estas estrategias y aumentar la conciencia sobre la seguridad vial para garantizar que las carreteras sigan siendo seguras para todos los usuarios.

La educación y la prevención son claves para continuar reduciendo el número de fatalidades en las carreteras vascas.