El Consejo de Gobierno del País Vasco ha aprobado recientemente una ayuda económica de 50,000 euros a la Corporación Vivamos Humanos, una entidad colombiana que trabaja por la paz y los derechos humanos en su país.

Esta medida, impulsada por la agencia eLankidetza de Cooperación y Solidaridad, tiene como objetivo apoyar una iniciativa orientada a humanizar el conflicto armado en Colombia, promoviendo la participación activa de la sociedad civil en la construcción de la paz.

A pesar de la firma del Acuerdo de Paz en 2016, Colombia todavía enfrenta importantes desafíos en términos de violencia y crisis humanitaria, especialmente en regiones donde la población civil vive bajo constantes amenazas.

Las comunidades indígenas, afrocolombianas, campesinas, así como defensores de derechos humanos, niños y mujeres son particularmente vulnerables a esta situación inestable.

En respuesta a esta problemática, la Corporación Vivamos Humanos ha implementado, desde hace varios años, la iniciativa llamada 'Mesas Humanitarias y de Construcción de Paz'. Este programa, respaldado por eLankidetza, busca no solo ofrecer un espacio para el diálogo humanitario, sino también facilitar recursos que permitan establecer un proceso de paz efectivo en los territorios afectados.

La reciente subvención se destinará a fortalecer la Coordinadora Humanitaria, que agrupa a 15 organizaciones territoriales.

La meta es que estas entidades trabajen conjuntamente para crear propuestas que respeten y promuevan los derechos humanos, además de presentar la 'Agenda Humanitaria Nacional de Colombia' en diversas instancias, desde lo local hasta lo nacional.

Cabe mencionar que el 9 de julio se llevó a cabo un evento internacional en Bogotá donde se presentó la 'Agenda Urbana para la Paz y la No Violencia', con la participación de numerosos líderes locales e internacionales comprometidos con el proceso de paz.

Este proyecto colaborativo, que involucra a PHARE-Territorios Globales y la Agencia Presidencial de Cooperación Internacional de Colombia, también cuenta con el apoyo de eLankidetza, explorando cómo abordar las variadas formas de violencia que lamentablemente persisten en las ciudades colombianas.

La Agenda Urbana tiene como finalidad no solo combatir la violencia de manera integral, sino también fomentar la inclusión económica y promover la convivencia pacífica en el país.

Dentro de este marco, se propone desarrollar un modelo de Agenda Urbana en Buenaventura, Valle del Cauca, que incluirá la colaboración de actores locales y producirá una guía que servirá como modelo replicable en otras ciudades de Colombia o incluso en otros contextos internacionales.

La colaboración entre Euskadi y Colombia se ha evidenciado en un taller realizado en Bilbao este año, donde expertos en paz y derechos humanos, así como representantes de ONGs vascas y de otros territorios, se reunieron para contribuir desde la experiencia del País Vasco a la construcción de esta Agenda Urbana.

Esto muestra el compromiso continuado de Euskadi con el fortalecimiento de la paz y la promoción de derechos en el ámbito internacional.