En un evento celebrado en el Centro de Día IKATZBIZI, el Vicelehendakari y consejero de Economía, Trabajo y Empleo de Euskadi, Mikel Torres, asistió a la presentación de la Memoria Social 2023 de Gizatea, una organización que integra empresas de inserción en la comunidad.

Durante su intervención, Torres destacó la importancia de la colaboración continua entre el departamento de Economía y Gizatea, subrayando el compromiso del Gobierno Vasco de mantener un apoyo constante hacia este tipo de iniciativas.

"Nuestro departamento tiene un firme compromiso con las empresas de inserción y los Centros Especiales de Empleo.

Esto se traduce en un respaldo a sus actividades diarias a través de diversas ayudas económicas.

Además, valoramos la innovación que estas organizaciones aportan al mercado laboral, lo cual se materializa en colaboraciones para llevar a cabo distintos estudios", afirmó Mikel Torres.

Este compromiso va más allá del apoyo financiero; se enmarca dentro de una visión amplia de lo que significa el progreso social y económico.

Torres enfatizó que Gizatea no solo constituye una herramienta vital para la inclusión de las personas en situación de vulnerabilidad, sino que también juega un papel crucial en el desarrollo económico integral del País Vasco.

"Euskadi no puede avanzar económicamente si no se garantiza la cohesión social", añadió el Vicelehendakari.

La Memoria Social presentada por Gizatea refleja un balance positivo, señalando que, a pesar de los desafíos enfrentados, se han logrado resultados significativos en la inclusión laboral de grupos desfavorecidos.

Esta capacidad de adaptación y resiliencia se considera un motor de confianza para encarar el futuro con optimismo.

El ámbito de la economía social ha cobrado gran relevancia en los últimos años en Europa, siendo una alternativa sustentable y responsable que prioriza el bienestar de las personas sobre las ganancias económicas.

En 2020, la economía social representaba ya más del 10% del PIB de la Unión Europea y empleaba alrededor de 14 millones de personas.

En este contexto, Euskadi ha sabido posicionarse como un referente en esta área a través del apoyo a modelos de negocio inclusivos que favorecen tanto a trabajadores como a comunidad.

Las iniciativas de este tipo no solo generan empleo, sino que también promueven un tejido social más cohesionado y solidario, algo que se torna esencial en tiempos de crisis y transformación como los vividos recientemente a causa de la pandemia.

La lección aprendida es que la inclusión social y el desarrollo económico no son conceptos opuestos, sino que deben coexistir y reforzarse mutuamente.

Por lo tanto, el esfuerzo continuo del Gobierno Vasco en esta dirección, evidenciado en la presentación de la Memoria Social 2023, reafirma la disposición de las autoridades para seguir impulsando la inclusión y el bienestar social como pilares fundamentales de una economía robusta y sostenible en Euskadi.