Las ayudas para asociaciones ganaderas en Euskadi buscan promover la conservación y mejora de razas puras de producción en el próximo año.

El Consejo de Gobierno de Euskadi, en una reciente sesión, ha aprobado la orden propuesta por la consejera de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca, Amaia Barredo, que establece las bases para la convocatoria de ayudas destinadas a las asociaciones ganaderas que trabajen con razas puras de producción durante el año 2024. Esta iniciativa tiene como objetivo principal fomentar la conservación, selección, mejora y promoción de estas razas, que son fundamentales no solo para la diversidad genética del sector ganadero, sino también para la sostenibilidad de la agricultura en la región.

Para este ejercicio fiscal, se ha reservado un monto total de 600.000 euros, lo que equivale a aproximadamente 600.000 euros, asignados a estas ayudas desde los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma de Euskadi.

Este esfuerzo financiero subraya la importancia que el Gobierno Vasco otorga a la ganadería sostenible y al bienestar de los productores que operan en este ámbito.

Las ayudas son especialmente dirigidas a aquellas iniciativas que contribuyan a fortalecer la estructura del sector ganadero y que, a su vez, permitan una mejor gestión de los recursos genéticos disponibles.

Entre los gastos subvencionables se incluyen aquellos relacionados con la organización y participación en certámenes ganaderos, además de la creación o mantenimiento de libros genealógicos, así como pruebas de calidad genética y rendimiento del ganado.

Esto no solo beneficiará a los productores, sino que también garantizará que las prácticas ganaderas en Euskadi se realicen de manera responsable y ética, priorizando siempre la calidad sobre la cantidad.

Históricamente, Euskadi ha demostrado ser un pionero en el ámbito de la ganadería sostenible.

Desde el desarrollo de razas autóctonas hasta la implementación de prácticas que respeten el medio ambiente, la región ha trabajado arduamente para garantizar que sus tradiciones ganaderas se mantengan relevantes en un mundo que cambia constantemente.

En este sentido, las razas puras son una parte crucial de esa herencia cultural y agrícola que el Gobierno busca preservar y promover.

Además, esta medida se alinea con las políticas europeas de protección de la diversidad genética y el apoyo a la agricultura local.

La preservación de razas autóctonas no solo juega un papel esencial en la economía de los pequeños ganaderos, sino que también contribuye a la salud del ecosistema en general.

Las razas tradicionales son más adaptables a las condiciones locales y, por lo tanto, son más resistentes frente a enfermedades y cambios climáticos.

En resumen, con la convocatoria de estas ayudas, Euskadi reafirma su compromiso con la sostenibilidad y el desarrollo del sector ganadero, asegurando que las futuras generaciones puedan disfrutar de las riquezas culturales y biológicas que este aporta.