El Gobierno Vasco presenta nuevas estrategias y herramientas para transformar los centros sociales dirigidos a personas mayores en Euskadi, fomentando la participación activa y la innovación. La iniciativa busca fortalecer estos espacios en los ámbitos rural y urbano durante 2025, promoviendo un envejecimiento activo y comunitario.

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Este proyecto, llamado Helduak Zabaltzen, busca transformar más de 400 #centros sociales distribuidos en los territorios de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa durante el año 2025, promoviendo un envejecimiento activo, saludable y conectado con la comunidad.

Desde hace varios años, #Euskadi ha sido pionera en políticas de envejecimiento activo, con una larga trayectoria en la creación y mejora de centros sociales y de ocio para mayores.

Sin embargo, ante los cambios demográficos y sociales, se ha reconocido la necesidad de innovar y ampliar las funcionalidades de estos espacios. La iniciativa Helduak Zabaltzen surge como una respuesta para facilitar una #participación más activa de las personas mayores, fomentando la inclusión social, la digitalización y el desarrollo de nuevos modelos de convivencia.

El programa se ha presentado en una jornada celebrada en el Palacio de Europa de Vitoria-Gasteiz, donde asistieron más de 100 representantes de centros sociales, instituciones y organizaciones comunitarias.

Durante el evento, se compartieron buenas prácticas y testimonios que evidencian los avances realizados en los últimos años, especialmente en municipios pequeños y rurales, donde se han logrado fortalecer la gobernanza, promover la participación y reducir la soledad no deseada.

El proceso de #transformación ha sido inspirado en experiencias previas, como la del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, que ha llevado a cabo una profunda renovación de sus centros sociales mediante la red Bizan, fomentando espacios más abiertos, digitales y colaborativos.

Gracias a la participación activa de las propias personas mayores, el programa ha identificado necesidades clave como mejorar la integración de hombres y recientes jubilados, fortalecer las conexiones con agentes locales y luchar contra la dispersión de viviendas que dificulta la comunicación.

En los resultados parciales, se destaca la mejora en la coordinación entre centros, la creación de nuevas ofertas de ocio y formación, así como la puesta en marcha de canales digitales como podcasts y páginas web.

Estas acciones han permitido que los centros sociales de Euskadi se conviertan en espacios dinámicos, inclusivos y relacionados con las comunidades locales.

Uno de los objetivos principales del programa es diferenciar los modelos de centros sociales en entornos rurales y urbanos

Uno de los objetivos principales del programa es diferenciar los modelos de centros sociales en entornos rurales y urbanos, adaptándolos a las realidades específicas de cada territorio.

Además, se busca diversificar los perfiles de participantes, incorporando generaciones más jóvenes y promoviendo una participación activa y plural.

Para ello, se organizarán visitas y encuentros entre diferentes centros para fortalecer la red de colaboración y aprendizaje.

Desde la Dirección de Apoyos para la Vida Plena del Gobierno Vasco, se han elaborado nuevas guías que facilitan el proceso de transformación. Estos recursos contienen metodologías participativas, recomendaciones para crear grupos de trabajo y propuestas para elaborar planes integrales de cambio.

Se distribuirán en los centros sociales de toda Euskadi, tanto en formato digital como en papel.

La consejera de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico, Nerea Melgosa, afirmó que "esta herramienta nos permitirá generar conocimiento innovador y posicionar a Euskadi como un referente en la actualización de infraestructuras comunitarias para el bienestar de las personas mayores".

Además, destacó la importancia de la digitalización y la participación activa para mejorar la calidad de vida en la tercera edad.

Durante 2025, el programa alcanzará tanto municipios rurales como urbanos en las tres provincias vascas, incluyendo localidades como Salvatierra, Alegría, Araia, Ispaster, Lekeitio, Ataun y Beasain.

La finalidad es crear un modelo diverso y flexible que permita a los centros sociales convertirse en auténticos espacios de encuentro y apoyo mutuo.