El Gobierno Vasco promueve iniciativas para apoyar a personas desempleadas mayores de 45 años y en riesgo de exclusión social, con un presupuesto que supera los 23 millones de euros en dos años.
En la comunidad autónoma del País Vasco, el Gobierno, a través de Lanbide – Servicio Público Vasco de Empleo, ha lanzado un programa de ayudas destinado a personas desempleadas mayores de 45 años y a aquellos que se encuentran en situación de vulnerabilidad o en riesgo de exclusión social.
Este esfuerzo forma parte de una estrategia más amplia para garantizar que el crecimiento económico beneficie a toda la población.
Mikel Torres, Vicelehendakari y consejero de Economía, Trabajo y Empleo, ha manifestado en una reciente visita a Zumarraga que 'la buena marcha de la economía tiene que llegar a todos y todas.
No debemos dejar a nadie atrás'. Durante este encuentro, se presentó el programa titulado 'Proyectos Integrales de Empleo para colectivos de atención prioritaria', así como los resultados de las convocatorias para el periodo 2023-24 y 2024-25, tanto en la Comunidad Autónoma como a nivel municipal.
Estas ayudas son cruciales para ofrecer atención personalizada a las personas desempleadas, enfocándose especialmente en aquellos mayores de 45 años y en aquellos con un riesgo elevado de exclusión social.
El enfoque se basa en el desarrollo de itinerarios individualizados que integran diversas acciones, como la orientación laboral, la formación específica y la generación de empleo.
Torres subrayó que, 'en la actual coyuntura que vive Euskadi, donde hay una falta de mano de obra en muchos sectores, no podemos permitir que existan personas inactivas debido a cuestiones de edad, sexo o falta de orientación o preparación'.
El presupuesto destinado a estas ayudas es significativo, alcanzando los 12 millones de euros (aproximadamente 12,3 millones de dólares) para el año 2023-24, y unos 11,5 millones de euros (alrededor de 11,8 millones de dólares) para la convocatoria de 2024-25.
Gracias a esta inversión se han financiado 44 y 45 proyectos respectivamente, involucrando a un total de 437 y 441 personas, en cada una de las iniciativas.
Los 'Proyectos Integrales de Empleo' han surgido como una evolución exitosa de la iniciativa llamada 'Nuevos proyectos territoriales para el reequilibrio y la equidad.
Colectivos vulnerables', que se enmarca dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por la Unión Europea a través del programa NextGenerationEU.
Esta política de empleo se inscribe dentro de un contexto histórico en el que el País Vasco ha enfrentado retos socioeconómicos significativos. Desde el final de la dictadura en 1975, la región ha experimentado una transformación económica hacia un modelo más industrial y de servicios. Sin embargo, la crisis financiera de 2008 y sus secuelas destacaron la necesidad de implementar políticas que atiendan a los colectivos más desfavorecidos.
Las iniciativas actuales buscan no solo adaptar las competencias de los trabajadores frente a un mercado laboral cambiante, sino también fomentar la inclusión y el bienestar social, asegurando que toda la población pueda beneficiarse del desarrollo económico sostenible en la región.
