El Gobierno Vasco impulsa una nueva edición del programa Juventud Vasca Cooperante, que en 2025 reunirá a 52 jóvenes en proyectos de cooperación internacional en países de América, África y Asia, promoviendo la solidaridad y el desarrollo social.
Desde su inicio en 1993, más de 2.500 jóvenes han participado en diversos proyectos en países de América, África y Asia, contribuyendo con esfuerzos en áreas como la educación, derechos humanos y empoderamiento femenino.
Durante los meses de julio, agosto y septiembre, 52 jóvenes de entre 22 y 30 años se incorporarán a 21 proyectos gestionados por varias ONG vascas, entre ellas Salesianos, Ayuda en Acción, Solidaridad Internacional, Medicus Mundi Bizkaia y otras organizaciones que trabajan en cooperación al desarrollo.
Los destinos de estos voluntarios incluyen países como Bolivia, Colombia, Ecuador, Guatemala, Honduras, México, Perú, Guinea Conakry y Senegal, donde participarán en actividades que van desde la atención a víctimas de violencia y trabajo con inmigrantes hasta la formación en derechos de salud y la educación inclusiva para niños con discapacidad.
Este programa, que en 2025 celebra su 31 aniversario, ha evolucionado a lo largo de los años para responder a las necesidades cambiantes del contexto global.
En sus primeras ediciones, la iniciativa comenzó con un enfoque en proyectos de apoyo inmediato, pero con el tiempo se ha ido especializando en acciones sostenibles y de largo plazo, fomentando que los jóvenes aprendan sobre la cultura y la realidad local, promoviendo así un intercambio enriquecedor.
A lo largo de su historia, más de 2.500 jóvenes han tenido la oportunidad de experimentar de primera mano las condiciones sociales y económicas en países en vías de desarrollo. Además, el programa ha contado con el respaldo financiero del Gobierno Vasco, que cubre los gastos de viaje y visado, posibilitando que los participantes puedan centrarse en su labor de cooperación.
Un ejemplo de los proyectos que se desarrollan es la iniciativa Hogar Belén en La Esperanza, Honduras, gestionada por la Asociación San Viator, que atiende a mujeres víctimas de violencia sexual en refugios locales.
Otros voluntarios trabajan en Guatemala con procesos de empoderamiento femenino, mientras que en Perú la labor se centra en la educación de niños con discapacidad.
El programa también fomenta la sensibilización y la formación de la juventud vasca en valores de cooperación y solidaridad
El programa también fomenta la sensibilización y la formación de la juventud vasca en valores de cooperación y solidaridad, fortaleciendo el compromiso social de las nuevas generaciones.
Además de promover acciones directas en terreno, el programa busca que en el futuro estas experiencias sirvan para crear una ciudadanía más comprometida con los derechos humanos y el desarrollo sostenible.
El acto de entrega de los billetes de avión y las mochilas, realizado en Lakua, simboliza un paso más en el compromiso del Gobierno Vasco con la juventud y la cooperación internacional.
La experiencia adquirida en estos programas no solo impacta positivamente en las comunidades beneficiadas, sino que también enriquece la formación personal y profesional de quienes participan.
Desde su creación, el programa ha sido un ejemplo de cómo la #cooperación internacional puede ser una herramienta educativa y formativa, promoviendo valores de solidaridad, empatía y responsabilidad social en la juventud vasca.
