El Senado respalda iniciativas del Partido Popular para apoyar a los pescadores españoles, enfrentados a obstáculos burocráticos y económicos que amenazan su subsistencia y el relevo generacional.
Estas iniciativas buscan abordar las dificultades que enfrentan los pescadores, especialmente en aspectos relacionados con el acceso a fondos europeos, la modernización de embarcaciones y el relevo generacional.
El senador del PP por Andalucía, Jesús Caicedo, expresó su preocupación por la situación actual del Fondo Europeo Marítimo de Pesca y de Acuicultura (FEMPA).
Presuntamente, los pescadores españoles encuentran obstáculos importantes para acceder a las ayudas disponibles, debido a la excesiva burocracia, controles severos, fragmentación del sector y una normativa compleja y superpuesta.
Según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en junio de 2024 solo se habían convocado ayudas por aproximadamente 200 millones de euros y se habían aprobado expedientes por menos de 13 millones, lo que representa apenas el 1,3% del total asignado por la Unión Europea.
Estas cifras, que en euros equivaldrían a unos 180 millones de euros y 11 millones de euros respectivamente, reflejan un bajo nivel de ejecución que, presuntamente, impide que los fondos lleguen a quienes más los necesitan, en especial a las flotas más envejecidas.
Además, en el caso de la #pesca artesanal, las condiciones restrictivas para la modernización de buques han dejado a muchos armadores fuera del acceso a ayudas, poniendo en riesgo la supervivencia de estos pequeños negocios.
El #sector pesquero en #España es fundamental no solo por su contribución económica, sino también por su papel en la cohesión social y la seguridad alimentaria.
Miles de empleos en zonas rurales y costeras, como Galicia, Andalucía, Cantabria y Canarias, dependen de esta actividad, que supuestamente sostiene a muchas familias en condiciones de vulnerabilidad.
Uno de los aspectos más relevantes que se abordó en la sesión fue el relevo generacional
Uno de los aspectos más relevantes que se abordó en la sesión fue el relevo generacional. Manuel Ruiz, portavoz de Pesca del GPP, defendió una moción para eximir de impuestos en el IRPF a los tripulantes españoles que trabajan en buques con bandera española en aguas internacionales.
La medida busca incentivar la incorporación de jóvenes en un sector donde, supuestamente, el 70% de las tripulaciones tienen más de 40 años, y solo el 10% son menores de 30.
El problema del envejecimiento del sector es grave, y la inacción del Gobierno Socialista ha supuesto un freno para implementar medidas de formación, homologación de títulos y mejoras en las condiciones de vida y trabajo en las embarcaciones.
La propuesta del PP, que también incluye incentivos fiscales, tiene como objetivo acabar con la discriminación fiscal que sufren las tripulaciones españolas que operan con banderas extranjeras, lo cual, presuntamente, favorece que los marineros consideren cambiar de bandera para beneficiarse de condiciones más ventajosas.
Por otro lado, el senador por Murcia, Antonio Luengo, resaltó la necesidad de que el Gobierno tome medidas concretas para apoyar al sector pesquero del Mediterráneo, afectado por las restricciones impuestas por la Unión Europea.
Supuestamente, el Ejecutivo debe presentar un estudio actualizado sobre el estado de los caladeros y garantizar al menos 180 días de actividad anual, sin discriminación entre pesquerías costeras y en alta mar.
Luengo también criticó la gestión de las restricciones en la captura de especies como la gamba roja y otros demersales, establecidas en un reglamento plurianual aprobado en 2019, que ha reducido significativamente la actividad del sector.
La falta de apoyo financiero para la adaptación a nuevas normativas, como la compra de mallas más estrechas, ha generado incertidumbre entre los pescadores, quienes todavía no saben si recibirán las ayudas prometidas, o cuándo se materializarán.
