Tesla enfrenta una nueva crisis con el llamado a revisión de más de 46,000 Cybertrucks debido a un problema de seguridad en sus paneles exteriores.
Tesla, la empresa de vehículos eléctricos liderada por Elon Musk, se enfrenta a otro desafío significativo tras anunciar el llamado a revisión de más de 46,000 unidades de su innovador Cybertruck.
Este problema surge en un contexto donde la compañía ya está lidiando con la caída de sus acciones y una creciente controversia en torno a las decisiones de su CEO.
Recientemente, un Cybertruck fue retirado del puerto de Ventura, California, después de que el conductor intentara usarlo para lanzar una moto de agua, lo que resultó en un incidente que ha acaparado la atención de los medios.
Este evento se suma a la serie de contratiempos que han marcado la trayectoria de Tesla en los últimos meses.
El llamado a revisión se debe a un defecto en un panel exterior de acero inoxidable que podría desprenderse mientras el vehículo está en movimiento, lo que representa un riesgo de accidente en la carretera.
Esta decisión afecta a los vehículos fabricados entre noviembre de 2023 y el 27 de febrero de 2024, según el aviso presentado ante la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras de EE.
UU. (NHTSA).
Este es el octavo llamado a revisión para el Cybertruck desde enero de 2024, un hecho que ha generado preocupación entre los consumidores y los inversores.
Tesla ha señalado que está al tanto de al menos 151 reclamaciones de garantía que podrían estar relacionadas con este problema. Como parte de la solución, la compañía planea reemplazar el conjunto del panel de riel con uno que cumpla con los requisitos de durabilidad, asegurando que los vehículos producidos antes de la implementación de esta nueva medida serán actualizados antes de su entrega.
Hackers piratean funciones de suscripción de Tesla
Un grupo de hackers logró piratear el acceso a funciones de suscripción de Tesla, una de las marcas de automóviles más tecnológicas del mundo. Este ataque cibernético permitió el acceso remoto a funciones pagas como la calefacción de los asientos y el paquete completo de conducción autónoma, cuyo valor en suscripción alcanza los 15.000 dólares. Los investigadores lograron vulnerar los sistemas de Tesla mediante una técnica conocida como 'jailbreaking', que consiste en explotar los defectos del dispositivo para instalar software distinto al proporcionado por el fabricante. Además de acceder a estas funciones, los hackers también obtuvieron datos personales almacenados en el sistema de infoentretenimiento del vehículo, como la lista de contactos del conductor, registros de llamadas y contraseñas de Wi-Fi.El contexto económico también juega un papel crucial en esta situación, ya que las acciones de Tesla han caído más del 50% desde diciembre, lo que ha llevado a Musk a buscar apoyo en figuras políticas, incluido el expresidente Donald Trump.
En un intento por rescatar la imagen de la compañía, Trump se ha posado junto a varios vehículos Tesla en el jardín de la Casa Blanca, afirmando su intención de adquirir uno como un acto de apoyo a Musk.
Sin embargo, estos esfuerzos no han podido frenar la ola de protestas que han surgido en respuesta a las políticas de Musk en su papel como director de la Oficina de Eficiencia del Gobierno, donde ha implementado recortes significativos y despidos masivos.
Estas acciones han provocado una serie de incidentes de vandalismo en concesionarios de Tesla en todo Estados Unidos. Recientemente, el Departamento de Justicia anunció que varias personas enfrentan cargos graves por supuestamente usar cócteles molotov para incendiar vehículos y estaciones de carga de Tesla.
El clima de tensión también se ha visto reflejado en eventos públicos, como la reciente exclusión de Tesla de la Feria Internacional del Automóvil de Vancouver, una decisión que ha sido recibida con críticas por parte de los seguidores de la marca.
Esta situación plantea interrogantes sobre el futuro de Tesla y la capacidad de Musk para manejar la creciente presión tanto desde el mercado como desde el ámbito social.
La compañía se encuentra en una encrucijada y los próximos pasos serán cruciales para determinar su rumbo en el competitivo mercado de vehículos eléctricos.
