La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) ha iniciado una investigación sobre Tesla debido a posibles retrasos en la notificación de accidentes con sus vehículos autónomos. La agencia busca esclarecer si la compañía ha incumplido las políticas internas al presentar informes demasiado tardíos, lo que podría poner en entredicho la seguridad de su tecnología de conducción automática.

Imagen relacionada de investigacion a tesla por retrasos en informes de accidentes en sus vehiculos autonomos

La pesquisa fue iniciada el pasado 20 de agosto, después de que se detectara que la compañía no reportó ciertos incidentes en los plazos establecidos, supuestamente, debido a problemas en su sistema de recolección de datos.

Según las normativas internas, las empresas deben presentar informes de accidentes con sus #vehículos autónomos en un plazo máximo de cinco días desde que ocurren.

Sin embargo, Tesla, presuntamente, ha entregado estos informes semanas o incluso meses después de los hechos, lo que ha generado preocupación en las autoridades de regulación.

La #NHTSA ha declarado que su principal interés es verificar si estos retrasos obedecen a fallos técnicos que #Tesla asegura haber corregido recientemente.

Supuestamente, Tesla justificó los retrasos alegando un problema en su sistema de recopilación de datos, problema que, según la compañía, ya habría sido resuelto.

La investigación pretende determinar si dicha afirmación es verídica y si, en efecto, los sistemas están funcionando correctamente para garantizar una respuesta rápida ante incidentes.

Este caso no es aislado. La historia de Tesla en materia de seguridad y transparencia en la gestión de accidentes con vehículos autónomos ha sido polémica desde hace años.

La compañía, liderada por Elon Musk, ha enfrentado varias investigaciones y críticas, principalmente relacionadas con la percepción de que minimiza la gravedad de ciertos incidentes.

La NHTSA también abrió una pesquisa sobre 2

En 2024, la NHTSA también abrió una pesquisa sobre 2.5 millones de vehículos Tesla para evaluar su rendimiento en condiciones de baja visibilidad, como niebla o lluvia intensa. Además, en junio pasado, circuló en redes sociales un video donde se mostraba a autos Tesla en Austin conduciendo en carriles incorrectos, excediendo los límites de velocidad y violando otras normas de tránsito, lo que propició una investigación informal.

Supuestamente, estas acciones han avivado las dudas sobre la seguridad real de la tecnología de conducción autónoma de Tesla, que todavía no ha sido completamente validada en diferentes escenarios de tráfico.

La compañía ha defendido sus sistemas, afirmando que su software es seguro y que los incidentes son casos aislados.

No obstante, expertos en #seguridad vial y defensores de la regulación del sector han pedido mayor transparencia y control sobre las operaciones de Tesla, especialmente en lo que respecta a la gestión de datos y la comunicación de incidentes.

La investigación de la NHTSA busca no solo esclarecer los retrasos en los informes, sino también evaluar si la tecnología de Tesla cumple con los estándares necesarios para garantizar la seguridad de todos los usuarios de las vías.

Mientras tanto, Elon Musk y su empresa continúan desarrollando nuevas versiones de sus vehículos autónomos, prometiendo mayor seguridad y eficiencia.