Tesla ha visto caer su valor por debajo de $1 billón, mientras las ventas en Europa disminuyen drásticamente. ¿Qué significa esto para el futuro de la compañía?
En un giro sorprendente para los inversores, Tesla ha visto su valor caer por debajo de los $1 billón por primera vez desde noviembre, coincidiendo con un descenso considerable en sus ventas en Europa.
Durante el mes de febrero, las acciones de la empresa experimentaron una caída del 28%, lo que ha llevado a muchos a cuestionar el futuro de la automotriz eléctrica.
Según datos de S&P Global Market Intelligence, las acciones de Tesla se desplomaron un 8% después de la publicación de cifras que revelaron una disminución alarmante en sus registros de ventas en el viejo continente.
El ascenso de Tesla después de las elecciones fue meteórico, impulsado en parte por la percepción de que la estrecha relación de Elon Musk con el expresidente Donald Trump beneficiaría a la compañía.
Sin embargo, esta idea comenzó a desmoronarse el mes pasado, pues muchos inversores se dieron cuenta de que no había acciones concretas que Trump pudiera tomar para apoyar a Tesla.
Además, la imagen de Musk se ha visto afectada por su papel en la reducción de personal de la administración federal y su apoyo a partidos extremos en Europa, lo que ha desalentado a algunos clientes potenciales.
No hay un solo factor que explique la caída de las acciones de Tesla; sin embargo, parece que los inversores han llegado a la conclusión de que la compañía estaba sobrevalorada tras un aumento de precios post-electoral que no estuvo respaldado por un cambio significativo en los fundamentos del negocio.
A medida que las noticias sobre la participación de Musk en el gobierno y su reciente propuesta de inversión de €90.000 millones para OpenAI se filtraron, la confianza de los inversores se vio afectada.
Hackers piratean funciones de suscripción de Tesla
Un grupo de hackers logró piratear el acceso a funciones de suscripción de Tesla, una de las marcas de automóviles más tecnológicas del mundo. Este ataque cibernético permitió el acceso remoto a funciones pagas como la calefacción de los asientos y el paquete completo de conducción autónoma, cuyo valor en suscripción alcanza los 15.000 dólares. Los investigadores lograron vulnerar los sistemas de Tesla mediante una técnica conocida como 'jailbreaking', que consiste en explotar los defectos del dispositivo para instalar software distinto al proporcionado por el fabricante. Además de acceder a estas funciones, los hackers también obtuvieron datos personales almacenados en el sistema de infoentretenimiento del vehículo, como la lista de contactos del conductor, registros de llamadas y contraseñas de Wi-Fi.Las tarifas también han comenzado a pesar sobre Tesla, afectando a toda la industria automotriz, y la presión en mercados clave como China podría traer consecuencias adicionales.
De acuerdo con datos de registros europeos, las inscripciones de Tesla en Europa cayeron un 45% en enero en comparación con el año anterior, a pesar de que las ventas generales de vehículos eléctricos aumentaron un 37%.
Este descenso en las ventas es preocupante y aunque puede ser un fenómeno temporal influenciado por problemas en la cadena de suministro, si la tendencia persiste, podría resultar devastadora para la marca.
Además, se han reportado evidencias anecdóticas de una disminución en las ventas en California, junto con protestas contra las políticas de Musk frente a las tiendas de Tesla.
El riesgo reputacional que enfrenta Tesla por la implicación política de Musk es difícil de medir, pero claramente está presente. Con fundamentos de negocio que se debilitan, la compañía reportó una caída en las ventas de vehículos el año pasado, y sus acciones siguen siendo caras, con un ratio precio/ganancias superior a 100.
Esto indica que aún hay margen para una caída significativa en el valor de sus acciones. Los inversores mantienen la esperanza de que la inteligencia artificial y los robotaxis puedan impulsar la próxima fase de crecimiento de la acción, pero mantener una buena reputación ante los consumidores será clave para lograrlo.
Sin embargo, las acciones de Musk podrían estar poniendo en peligro esas posibilidades sin que él lo sepa.
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