La fabricante de vehículos eléctricos Rivian ha iniciado una llamada a revisión de más de 29,000 unidades en Estados Unidos debido a problemas en el sistema de cinturones de seguridad, que podría aumentar el riesgo de lesiones en caso de accidente. La compañía asegura que no tiene constancia de incidentes o lesiones relacionadas con este fallo, pero la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA) ha abierto una investigación preliminar.
La compañía, que ha logrado posicionarse como uno de los principales competidores en el mercado de vehículos eléctricos, ha informado que el problema se relaciona con el cable del pretensor del cinturón, un componente esencial que se activa en caso de colisión para tensar el cinturón y reducir las lesiones.
Presuntamente, este fallo se produce cuando los conductores se sientan repetidamente sobre el cinturón ya abrochado, causando daños en el cable del pretensor y comprometiendo su funcionamiento en una situación de accidente.
Supuestamente, este problema no ha provocado aún incidentes o lesiones en los vehículos afectados, según ha declarado #Rivian en un comunicado. Sin embargo, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA) abrió en septiembre una investigación preliminar tras recibir varias quejas de conductores sobre cables que se desgarran, se rompen o se desenrollan, dejando a los ocupantes sin la protección adecuada en caso de accidente.
La compañía ha implementado una actualización de software que permite detectar automáticamente el uso incorrecto del cinturón de seguridad mediante el sistema de conducción.
Además, se ha comprometido a inspeccionar y, si es necesario, reemplazar de forma gratuita el conjunto de pretensores del cinturón en los vehículos afectados.
Rivian también ha señalado que la revisión y reparación no implicará costos para los propietarios y que están trabajando en colaboración con las autoridades para garantizar la seguridad de sus clientes
Supuestamente, Rivian también ha señalado que la revisión y reparación no implicará costos para los propietarios y que están trabajando en colaboración con las autoridades para garantizar la seguridad de sus clientes.
La firma californiana, fundada en 2009, ha experimentado un crecimiento acelerado en los últimos años, lanzando modelos innovadores que combinan tecnología avanzada y sostenibilidad.
Este tipo de problemas no es exclusivo de Rivian, ya que otros fabricantes de vehículos eléctricos también han enfrentado llamadas a revisión debido a fallos en sistemas de seguridad o componentes electrónicos.
En el contexto histórico, la industria automotriz ha estado en constante evolución, con grandes avances en seguridad y tecnología, pero también con desafíos relacionados con la fiabilidad de nuevos sistemas.
Supuestamente, la tendencia hacia una mayor adopción de vehículos eléctricos en Europa también ha llevado a una mayor atención por parte de las agencias regulatorias, que buscan garantizar que estas innovaciones no comprometan la seguridad vial.
La Unión Europea, por ejemplo, ha establecido normativas estrictas en materia de seguridad y emisiones, incentivando a los fabricantes a mejorar continuamente sus productos.
En definitiva, la llamada a revisión de Rivian refleja el esfuerzo de la empresa por mantener la confianza de sus clientes y cumplir con los estándares de seguridad más exigentes.
