Supuestamente, más de medio millón de automóviles de marcas como Chrysler, Chevrolet, Kia y otras han sido retirados del mercado debido a defectos que comprometen la seguridad de los conductores y pasajeros. La National Highway Traffic Safety Administration ha emitido varias alertas de retiro que incluyen modelos fabricados entre 2022 y 2025, con llamadas a los propietarios para que verifiquen si sus vehículos están afectados y acudan a realizar las reparaciones sin coste alguno.

Imagen relacionada de retiran mas de 500000 vehiculos por fallos que afectan a marcas como chrysler y chevrolet

Entre las marcas más afectadas se encuentran Chrysler, Chevrolet, Kia, BMW, Ford, #Subaru y Lincoln. Estos llamados a revisión se producen en un contexto donde la industria automotriz ha incrementado sus controles de calidad, supuestamente con el fin de prevenir accidentes y garantizar que los #vehículos cumplan con los estándares de #seguridad exigidos por las autoridades.

Supuestamente, uno de los principales problemas detectados en estos vehículos afecta a los sistemas de airbags laterales en ciertos modelos de Chrysler.

La marca ha anunciado que más de 250,000 unidades de sus modelos Pacifica y Voyager, fabricados entre 2022 y 2025, presentan posibles defectos en las costuras de las cortinas de los airbags laterales, lo que podría impedir que estos se desplieguen correctamente en caso de accidente.

Los concesionarios están instruidos para inspeccionar y reemplazar estos componentes de forma gratuita, y se espera que las cartas de notificación a los propietarios comiencen a enviarse en los próximos días.

Por otro lado, marcas como Lincoln, marca de lujo de Ford, han reportado que alrededor de 133,000 vehículos de sus modelos Aviator, producidos entre 2020 y 2025, podrían tener problemas con los acabados de las molduras traseras, las cuales podrían desprenderse durante la conducción.

La causa presuntamente está en una unión insuficiente en las barras de las ventanas traseras y en las molduras de la C-pilar. Los talleres autorizados deberán reparar o reemplazar estos componentes sin costo para los propietarios.

BMW, por su parte, ha iniciado un llamado de atención para unos 71,000 vehículos de sus series 4 e i7, fabricados entre 2022 y 2025, debido a un fallo en el software del motor de tracción eléctrica.

Presuntamente, este software puede detectar erróneamente una condición de doble aislamiento, provocando un apagado del sistema de alto voltaje y, en consecuencia, una pérdida total de potencia mientras se conduce.

La actualización del software se puede realizar de forma remota o en los talleres, sin coste para los usuarios, y las notificaciones comenzarán a enviarse a partir del 5 de agosto.

Chevrolet ha llamado a revisión a más de 62

Asimismo, #Chevrolet ha llamado a revisión a más de 62,000 de sus camionetas Silverado de los años 2019 a 2024, debido a una posible fuga en el líquido de frenos que podría generar un cortocircuito eléctrico.

Se recomienda a los propietarios que, hasta que se realice la reparación, estacionen sus vehículos en lugares abiertos y alejados de estructuras. La solución consiste en reemplazar el sensor de presión del freno, proceso que también será gratuito.

En el ámbito de Kia, aproximadamente 11,000 unidades del modelo Niro EV, fabricadas entre 2020 y 2022, están siendo revisadas por problemas en la placa de circuito de la cámara trasera, que puede dañarse por picos de voltaje y dejar de mostrar la imagen correctamente.

La marca se ha comprometido a reemplazar las cámaras sin coste y enviará notificaciones a los propietarios en agosto.

Por último, Subaru ha anunciado que unos 3,000 vehículos Forester 2025 presentan un problema con los anclajes de las sillas infantiles, que podrían aflojarse por instrucciones de trabajo inadecuadas.

Los concesionarios inspeccionarán y ajustarán estos anclajes gratuitamente, con envíos de cartas de aviso programados para mediados de agosto.

Este tipo de retiros, que parecen ser cada vez más frecuentes, han tenido un impacto en la percepción de seguridad de los consumidores y en la reputación de las marcas involucradas.

La historia de los retiros masivos en la industria automotriz no es nueva; en los años 70 y 80, marcas como #Ford y General Motors también enfrentaron retiradas masivas por problemas relacionados con frenos y sistemas eléctricos, lo que llevó a cambios en las regulaciones y a una mayor supervisión por parte de las agencias regulatorias.

Se recomienda a los propietarios consultar las bases de datos oficiales, como la de la NHTSA, o las páginas web de las marcas para verificar si su vehículo está incluido en alguna de estas campañas y acudir a los centros autorizados para realizar las reparaciones sin coste alguno.