Un reciente ganador de lotería en Texas se enfrenta a la retención de su premio de 83 millones de euros debido a un cambio en la normativa que prohíbe los servicios de mensajería para la compra de boletos.
Una mujer en Texas se encuentra en el centro de una controversia tras ganar un premio de 83 millones de euros en la lotería. Este importante jackpot, que representa uno de los más altos registrados en el estado, ha sido objeto de escrutinio debido a un cambio reciente en las regulaciones que prohíbe la venta de boletos de lotería a través de servicios de mensajería en línea.
La ganadora, cuya identidad no ha sido revelada, adquirió su boleto a través de la aplicación Jackpocket, un servicio que compra boletos por cuenta de los usuarios.
El 17 de febrero, la mujer compró su boleto en Austin, y aunque parece haber seguido todas las reglas estipuladas por la Comisión de Lotería de Texas, ahora enfrenta la incertidumbre de no recibir su premio.
Este cambio normativo, que fue anunciado por la Comisión de Lotería de Texas, tiene como objetivo garantizar la seguridad y la legalidad en las transacciones de lotería, argumentando que los servicios de mensajería carecen de supervisión adecuada.
El teniente gobernador de Texas, Dan Patrick, lanzó una serie de declaraciones en redes sociales, sugiriendo que la venta del boleto en una tienda vinculada a la empresa de apuestas DraftKings, que también posee Jackpocket, podría comprometer la integridad del sistema de lotería del estado.
En un video, Patrick enfatizó la extrañeza de que un premio tan grande fuera vendido por un servicio de mensajería, lo que ha suscitado dudas sobre la transparencia de la lotería.
Sin embargo, a pesar de las preocupaciones planteadas, la venta del boleto a través de Jackpocket fue completamente legal, ya que la empresa está autorizada por la Comisión de Lotería de Texas.
El director ejecutivo de la comisión, Ryan Mindell, ha señalado que las nuevas regulaciones buscan mejorar la percepción pública del sistema de lotería y mantener su integridad.
Según Mindell, el incumplimiento de estas nuevas reglas podría resultar en la pérdida de licencias para los minoristas que colaboren con servicios de mensajería.
La abogada de la ganadora, Randy Howry, ha defendido que su cliente actuó dentro del marco legal al utilizar Jackpocket, y ha cuestionado la decisión de retener el premio.
"Si permites que alguien juegue bajo tus reglas y luego no le pagas, ¿por qué alguien querría seguir jugando?", argumentó Howry. La ganadora había invertido 20 euros en boletos a través de la aplicación, y ha manifestado su frustración y enojo ante la situación, que la ha llevado de la alegría de ganar a la angustia por no recibir su premio.
La Comisión de Lotería aún no ha proporcionado detalles sobre la revisión del reclamo, que se encuentra bajo investigación externa. Mientras tanto, Jackpocket ha suspendido sus operaciones en Texas en respuesta a la nueva prohibición, aunque ha argumentado que ha cumplido con todas las normativas.
La empresa ha indicado que esta prohibición podría afectar la financiación pública de la educación, ya que ha contribuido significativamente a las ventas de boletos de lotería en el estado.
Por último, el gobernador de Texas, Greg Abbott, ha ordenado investigaciones sobre otras ganancias de la lotería, incluida la ganancia de 95 millones de euros de un jugador que supuestamente compró casi todas las combinaciones posibles.
Abbott ha subrayado la necesidad de que los texanos confíen en la integridad del sistema de lotería del estado, lo que ha llevado a un panorama incierto para los futuros jugadores de lotería.
