Joann, la conocida cadena de tiendas de telas y manualidades, prepara el cierre definitivo de sus establecimientos en mayo, tras cerrar 255 tiendas en abril debido a su segunda bancarrota en un año. La compañía ha sido vendida en una subasta y está en proceso de liquidación, afectando a miles de empleados y clientes en Estados Unidos.

La cadena de tiendas especializada en telas, manualidades y artículos para el hogar, Joann, se encuentra en la recta final de su cierre total en Estados Unidos.

La empresa, fundada en 1943 en Ohio, ha sido un referente en el sector minorista de artículos de manualidades por décadas. Sin embargo, en los últimos años ha enfrentado graves dificultades económicas que la llevaron a declarar bancarrota en dos ocasiones en un período de un año.

El pasado mes de febrero, Joann anunció oficialmente que cerraría todas sus tiendas tras presentar una segunda solicitud de bancarrota bajo el Capítulo 11, una medida que permite reestructurar deudas y preservar actividades, pero que en su caso fue seguida por la venta de todos sus activos en una subasta pública.

La compañía fue adquirida por el grupo liquidator GA Group, que se hizo con la totalidad de las tiendas y otros activos de la cadena en una puja que culminó en la venta en febrero.

Durante el mes de abril, Joann llevó a cabo ventas de liquidación en un total de 255 tiendas, un proceso que ha afectado a aproximadamente 19,000 empleados en todo el país.

Este número representa cerca de un tercio de las tiendas iniciales de la cadena, que en su momento contaba con más de 850 locales en Estados Unidos. La liquidación ha sido gradual, y se espera que en mayo se cierre la última tanda de tiendas restantes.

La cadena había anunciado en su momento la intención de cerrar más de 500 tiendas, pero los cierres se han ido realizando en diferentes fases. La mayoría de estos cierres han ocurrido en abril, y las tiendas que aún permanecen abiertas están en proceso de cierre definitivo en mayo. La compañía no ha especificado aún cuáles serán las ubicaciones finales, pero la confirmación llega a través de declaraciones de la portavoz de GA Group, Anne McCusker.

El cierre de Joann no solo representa la desaparición de un referente en el sector de manualidades, sino que también implica un impacto importante en el empleo y en la economía local de muchas comunidades donde operaba.

La empresa ha anunciado que implementará un plan de retención para sus empleados, con actividades como ferias de empleo y permisos especiales para que puedan buscar nuevas oportunidades laborales.

Históricamente, Joann ha sido un pilar para los aficionados a las manualidades, ofreciendo una amplia gama de productos y fomentando actividades creativas desde mediados del siglo XX.

La cadena fue pionera en ofrecer productos a precios accesibles y en promover el arte y la creatividad en Estados Unidos. No obstante, la competencia online y los cambios en los hábitos de consumo han afectado sus ventas en los últimos años.

La venta de activos y los cierres masivos que se están produciendo en 2024 marcan el fin de una era para la cadena, que en su apogeo contaba con tiendas en casi todos los estados.

La última fase de cierre se espera que concluya en las próximas semanas, dejando a los clientes y empleados con un sentimiento de nostalgia y pérdida.

La situación de Joann refleja también los desafíos que enfrentan muchas cadenas tradicionales en un mercado cada vez más digitalizado y competitivo.