El reconocido agente Ryan Serhant ha sido contratado para vender La Fontana, un lujoso edificio frente al mar en West Palm Beach, que busca un nuevo propietario interesado en desarrollar o renovar la propiedad. La venta del edificio completo refleja una tendencia creciente en el mercado inmobiliario de Florida, impulsada por costos crecientes y regulaciones de seguridad que motivan a los propietarios a desprenderse de sus activos.

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Esta propiedad, que cuenta con 140 unidades distribuidas en un edificio de 64 años de antigüedad, se encuentra en una ubicación privilegiada sobre el Intracoastal Waterway, con una extensión de casi tres acres y a solo dos millas del famoso Lake Worth Inlet.

La decisión de poner en venta toda la estructura ha sido motivada por diversos factores, entre ellos los altos costos de mantenimiento y las nuevas regulaciones de seguridad contra incendios que exigen una inversión significativa en sistemas de protección, como los rociadores automáticos.

La administración del edificio ha mencionado que, aunque la estructura cumple con las inspecciones y normativas vigentes, la implementación de estos sistemas representa una carga económica para los propietarios actuales.

El edificio, conocido como La Fontana, se encuentra actualmente en una etapa de consideraciones para su demolición y posible reconstrucción. Los propietarios aspiran a atraer a desarrolladores interesados en aprovechar la ubicación y las características del terreno, que en los últimos años ha visto un auge en nuevos proyectos residenciales de lujo.

La zona, situada justo al norte del centro urbano de West Palm Beach, ha visto una explosión en la construcción de condominios de hasta 28 y 31 pisos, con vistas inigualables y derechos riparios que permiten la marina y las embarcaciones.

En el pasado, la venta de edificios completos era poco común en la región, pero cambios en las regulaciones de seguridad, mayores costos de seguros y el envejecimiento de los residentes de los condominios están impulsando esta tendencia.

La venta de La Fontana, que en su momento fue considerado un símbolo de lujo y exclusividad, marca un hito en el mercado inmobiliario local.

Los propietarios actuales están considerando ofertas de importantes desarrolladores, como Al Adelson y Related Ross, quienes han mostrado interés en adquirir el edificio y su vecino, Portofino, un condominio tradicional de 56 años.

Adelson había ofrecido 135 millones de euros (equivalente a unos 150 millones de dólares) por cada propiedad, buscando una operación conjunta para obtener aproximadamente 8.5 hectáreas de tierra en la zona costera.

Por otro lado, la cooperativa La Fontana requiere que al menos el 80% de los residentes estén dispuestos a vender sus acciones para concretar la venta, un proceso que puede complicarse por las reglas internas.

En contraste, Portofino opera bajo un esquema de condominio tradicional, donde la aprobación de la mayoría de los propietarios es suficiente para aprobar una venta.

Algunos residentes, como Cynthia Witter, quien compró su unidad en Portofino en 2003 por unos 195,000 euros, y también posee una en La Fontana adquirida por unos 120,000 euros en la misma época, consideran que el mercado actual hace difícil mantenerse en la zona.

Witter ha expresado su disposición a vender ambas propiedades, dado que los precios de nuevas construcciones frente al mar superan ampliamente sus inversiones iniciales, alcanzando en algunos casos más de 950,000 euros.

El mercado inmobiliario en la zona continúa en auge, con al menos siete nuevos proyectos en desarrollo, algunos con alturas de hasta 31 pisos. La llegada de Serhant y su equipo refleja la tendencia de los grandes jugadores en bienes raíces de aprovechar estas oportunidades de venta, anticipando que en los próximos años, muchas propiedades similares serán puestas en el mercado debido al envejecimiento de los propietarios y a los costos crecientes.

El interés en vender toda una estructura, en lugar de unidades individuales, está ganando terreno, especialmente en un contexto donde las regulaciones y los costos de seguro están haciendo que mantener estos activos sea menos rentable.

Los expertos consideran que estas operaciones podrían convertirse en una norma en Florida

Los expertos consideran que estas operaciones podrían convertirse en una norma en Florida, dado el valor estratégico de estas parcelas y el interés de los desarrolladores en crear residencias de lujo en zonas privilegiadas.