Las cuentas de ahorro para salud (HSA) están sujetas a cambios importantes en 2025. Descubre qué debes saber para aprovechar al máximo estos beneficios fiscales.

1. **Requisitos actualizados**
En 2025, los requisitos para poder contribuir a una #HSA han cambiado. Para calificar con una cobertura individual, tu plan de #salud debe tener un deducible mínimo de 1,650 euros y un límite de gastos de 8,300 euros. Para las familias, el deducible mínimo se eleva a 3,300 euros, con un límite de gastos de 16,600 euros. Esto significa que la elegibilidad para contribuir a una HSA puede variar de un año a otro, así que es vital que revises tu cobertura anualmente. Es posible que este año califiques para una HSA, aunque no lo hiciste en años anteriores, así que asegúrate de estar al tanto de las nuevas regulaciones.
2. **Contribuciones del empleador cuentan**
Al igual que los planes de jubilación como las cuentas IRA o los 401(k), las HSA también tienen un límite de contribución anual.
En 2025, este límite es de 4,300 euros para la cobertura individual y 8,550 euros para la cobertura familiar. Un detalle importante es que cualquier contribución que realice tu empleador también cuenta para este límite. Por ejemplo, si tu empleador aporta 2,000 euros a tu HSA, solo podrás agregar otros 2,300 euros para alcanzar el límite máximo. Además, si tienes 55 años o más, puedes hacer una contribución adicional de 1,000 euros, lo cual puede ser una gran ventaja para quienes se acercan a la jubilación.
3. **Permite que tu dinero crezca**
Es fundamental hacer una distinción entre las HSA y las cuentas de gasto flexible (FSA)
Es fundamental hacer una distinción entre las HSA y las cuentas de gasto flexible (FSA). Mientras que las FSA requieren que uses tu dinero antes de que finalice el año del plan, las HSA no tienen un plazo para gastar los fondos. Esto significa que puedes dejar tu dinero en la HSA y permitir que crezca a lo largo de los años, similar a cómo funcionan las inversiones en cuentas de jubilación como una Roth IRA.
De hecho, los fondos de la HSA crecen libres de impuestos, lo que es una ventaja significativa. Si puedes, es recomendable cubrir tus gastos médicos inmediatos de tu propio bolsillo y mantener el saldo de tu HSA para el futuro, especialmente cuando te acerques a la jubilación.
Este enfoque te permite disfrutar de varios años de ganancias libres de impuestos.
Las HSA ofrecen algunas de las mayores ventajas fiscales disponibles, ya que las contribuciones, las ganancias y los retiros son libres de impuestos si se utilizan para gastos médicos calificados.
Es crucial familiarizarse con cómo funcionan estas cuentas para maximizar sus beneficios.