Supuestamente, General Motors destinará alrededor de 500 millones de euros a sus plantas en Michigan y Ohio para aumentar la fabricación de vehículos SUV y pickups en Estados Unidos, con miras a 2027, en una estrategia para fortalecer su presencia en el mercado y reducir costes relacionados con aranceles.
La compañía planea reforzar la #producción de sus vehículos #SUV y #pickups en sus plantas ubicadas en Michigan y Ohio, con el objetivo de preparar el terreno para 2027 y responder a la creciente demanda en el mercado estadounidense.
Este movimiento estratégico de GM se produce en un contexto donde la compañía busca consolidar su liderazgo en tecnologías de vehículos eléctricos y autónomos, además de optimizar su cadena de suministro y reducir los costos asociados a los aranceles que afectan a la industria automotriz.
La inversión, que fue confirmada por la propia GM, se dirige a modernizar líneas de ensamblaje y a adquirir nuevos equipos en las plantas de Romulus y Parma.
Supuestamente, en la planta de Romulus, en Michigan, se destinarán aproximadamente 270 millones de euros para la producción de transmisiones de 10 velocidades destinadas a pickups y SUV de gran tamaño, como la Chevrolet Silverado y la GMC Sierra.
Por otra parte, en Parma, cerca de Cleveland, en Ohio, se invertirán unos 230 millones de euros para fabricar chapas metálicas y componentes que se utilizan en diversas partes de los vehículos.
Se estima que estas inversiones generarán, presuntamente, unos 150 nuevos empleos en Parma, aunque no se esperan cambios en el empleo en Romulus en este momento.
La estrategia de GM también contempla la consolidación de la producción en otros centros clave, como la planta de Fairfax en Kansas, donde se ensamblan modelos como el Chevrolet Equinox y el Bolt EV.
Desde un punto de vista histórico, GM ha sido un pilar en la industria automotriz estadounidense desde su fundación en 1908 por William C. Durant. A lo largo de más de un siglo, la compañía ha pasado por numerosos altibajos, incluyendo crisis y recuperaciones, pero siempre ha mantenido un papel destacado en la innovación tecnológica y en el desarrollo de vehículos que han marcado tendencias.
Supuestamente, estas nuevas inversiones responden también a la presión de las políticas gubernamentales y a los cambios en la preferencia del consumidor hacia vehículos más sostenibles y eficientes.
En 2020, GM anunció su compromiso de convertirse en una marca completamente eléctrica para 2035, además de invertir en nuevas tecnologías de baterías y sistemas de conducción autónoma.
Incluyendo una #inversión histórica de unos 790 millones de euros en su planta de Buffalo
El monto total que GM ha destinado en los últimos años para fortalecer su presencia en #EE.UU. supera los 4.800 millones de euros, incluyendo una inversión histórica de unos 790 millones de euros en su planta de Buffalo, Nueva York, para desarrollar un nuevo motor V8 de próxima generación.
La compañía también ha anunciado la reorganización de varias líneas de producción para adaptarse a las nuevas demandas del mercado.
En conclusión, la apuesta de GM por aumentar su capacidad productiva en Estados Unidos con una inversión millonaria refleja su compromiso con el mercado local y su visión de futuro en la movilidad eléctrica y autónoma.
