Los costos de la gasolina en EE.UU. han experimentado una reducción significativa en comparación con el año anterior, y las proyecciones indican que esta tendencia podría continuar en los próximos meses. La estabilidad en los precios del petróleo y un aumento en la producción han contribuido a este escenario favorable para los consumidores.

Según el informe más reciente del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Departamento de Trabajo, en julio los #precios de la #gasolina registraron una disminución del 2,2% respecto a junio y una caída del 9,5% en comparación con julio del año anterior.

Esto significa que, en promedio, el precio por galón de gasolina regular en el país fue de aproximadamente 2,82 euros (unos 1,20 euros por litro), una reducción significativa respecto a los 3,44 dólares (cerca de 2,95 euros) de hace un año.

Este descenso en los precios del combustible se atribuye principalmente a un aumento en la producción de #petróleo por parte de los países de la organización OPEP+ y también por productores independientes en Estados Unidos, Brasil y Guyana.

La producción récord en EE.UU., que superó los 13 millones de barriles diarios, ha tenido un impacto directo en mantener estables los precios del crudo, que en los últimos meses ha oscilado entre 55 y 65 dólares (unos 50 y 60 euros) por barril.

La previsión del Departamento de Energía de Estados Unidos indica que el precio del Brent, la referencia internacional, podría caer a unos 55 euros (unos 58 dólares) por barril hacia finales de año y a unos 47 euros (unos 50 dólares) a principios de 2026.

Este escenario ha generado expectativas de que las tarifas en las estaciones de servicio continúen bajando en los próximos meses. Expertos como Matt Smith, analista de commodities en la firma Kpler, señalan que la tendencia a la baja en los precios del gas es una buena noticia para los consumidores, quienes pueden experimentar un aumento en su sensación de bienestar financiero, aunque enfrentan una inflación persistente en otros sectores.

Presenta un riesgo potencial para los precios

Asimismo, la temporada de huracanes, que alcanza su pico en septiembre, presenta un riesgo potencial para los precios, ya que las tormentas pueden dañar refinerías cercanas a la Costa del Golfo y afectar la producción.

Sin embargo, la tendencia general apunta a una disminución gradual de los costos del combustible. La Agencia de Información de Energía de EE.UU. estima que los precios en las estaciones podrían caer por debajo de los 2,70 euros (unos 2,82 dólares) por galón en octubre, lo que equivale a menos de 0,70 euros (unos 0,75 dólares) por litro, haciendo que el combustible sea más accesible para la mayoría de los conductores.

En un contexto histórico, los precios del petróleo y la gasolina han sido muy volátiles, con picos importantes en 2008 y 2012, cuando alcanzaron máximos cercanos a 147 dólares (unos 135 euros) por barril.

Desde entonces, cambios en la oferta y la demanda global, así como las políticas internacionales y los conflictos geopolíticos, han influido en la evolución de los precios.

Supuestamente, las sanciones a países productores y las tensiones en Oriente Medio han provocado aumentos temporales, pero la tendencia actual indica una recuperación gradual y una mayor estabilidad en el #mercado energético.

En definitiva, si las condiciones actuales se mantienen, los consumidores podrían beneficiarse de precios de la gasolina más bajos en los próximos meses, facilitando la movilidad y ayudando a aliviar la presión en sus presupuestos.