Una demanda revela abusos laborales en la cadena de suministro de Bumble Bee Foods, la mayor empresa de atún enlatado en Estados Unidos.

La famosa empresa Bumble Bee Foods, reconocida por ser uno de los principales productores de atún enlatado, enfrenta graves acusaciones que podrían afectar su reputación y operaciones.
Según una demanda presentada en un tribunal federal de California, se alega que la compañía 'se benefició conscientemente' del trabajo forzado y otros abusos en su cadena de suministro.
Los demandantes, cuatro pescadores indonesios, sostienen que sufrieron condiciones inhumanas en tres embarcaciones distintas que abastecían a Bumble Bee.
Entre las denuncias se encuentran casos de abuso físico, extensas jornadas laborales sin días de descanso, y la negación de atención médica. Agnieszka Fryszman, abogada de los demandantes, comentó en un comunicado que estos hombres buscaban empleos dignos para sostener a sus familias, pero se encontraron atrapados, aislados en el mar, sometidos a golpizas con garfios de metal, mal alimentados y obligados a trabajar sin parar, enfrentándose incluso a multas si intentaban escapar.
Este caso podría marcar un hito, ya que se considera la primera demanda por trabajo forzado en el mar contra una empresa estadounidense bajo la Ley de Protección de Víctimas de Trata.
Bumble Bee, que posee la mayor cuota de mercado en el sector del atún enlatado, fue adquirida en 2019 por el conglomerado pesquero taiwanés FCF Co. Ltd. por 865 millones de euros tras declararse en quiebra.
Un testimonio impactante proviene de Muhammad Sahrudin, quien describe la brutalidad del capitán de su barco: 'Me abofeteó, me golpeó en la cabeza y, lo peor, me apuñaló con una aguja'.
Otro demandante, Muhammad Syafi’i, narró que sufrió graves quemaduras por aceite caliente y aunque gritó de dolor, el capitán le ordenó que siguiera trabajando, dejándolo solo en la cocina.
Los demandantes aseguran que nunca pudieron abandonar los barcos en los que trabajaban y que se les negaba constantemente el tratamiento médico. Las embarcaciones, según se afirma, nunca regresaban al puerto, transfiriendo sus capturas a barcos de carga. La demanda sostiene que Bumble Bee estaba al tanto de las condiciones de trabajo y se beneficiaba económicamente de ellas.
Fryszman enfatizó que sus clientes buscan justicia no solo para ellos mismos, sino también para implementar cambios que protejan a otros pescadores, incluidos aquellos que actualmente se encuentran en las mismas embarcaciones.
Es importante recordar que la industria pesquera ha sido objeto de críticas por prácticas laborales abusivas en diversas partes del mundo. En el pasado, informes han revelado situaciones similares en otros países, lo que ha llevado a organizaciones internacionales a exigir una mayor regulación y vigilancia de las condiciones laborales en el mar.
Con la creciente presión pública y el escrutinio sobre la sostenibilidad y la ética en la producción de alimentos, el futuro de Bumble Bee podría depender de su respuesta a estas serias acusaciones.
La compañía aún no ha emitido un comentario oficial sobre la litigación, pero la atención sobre el caso está generando un debate significativo sobre los derechos de los trabajadores en la industria pesquera.