Un empate lleno de controversias para Talleres que rescató un punto en su visita a Rosario Central.

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La visita de Talleres de Córdoba a Rosario Central en el Gigante de Arroyito terminó en un empate agónico por 2-2, pero no sin controversia.

A pesar de igualar, el equipo albiazul salió del campo con un sentimiento de frustración debido a decisiones arbitrales que influyeron en el desarrollo del partido.

En la jornada 14 de la Liga Profesional, el conjunto cordobés sintió que fue perjudicado por dos penales en contra y una expulsión que complicó aún más su desempeño en el terreno de juego.

El inicio del partido mostró a un Talleres que tomó la delantera rápidamente.

A los cuatro minutos, Matías Catalán, el marcador central del equipo, logró abrir el marcador tras un tiro libre ejecutado por Rubén Botta.

Con este gol, Talleres se colocaba en una buena posición, aspirando a escalar en la tabla de posiciones y mantener la presión sobre el líder, Vélez, que estaba a cinco puntos al frente.

Sin embargo, Rosario Central no tardó en reaccionar.

Ignacio Malcorra, en ambos penales, le devolvió la esperanza al equipo local.

Primero, con un tiro desde los once metros por una falta de Girotti sobre Damián Martínez, lograron el empate transitorio de 1-1. La situación se complicó aún más para Talleres cuando, tras una revisión del VAR, el árbitro sancionó un segundo penal a favor de Central.

Durante un forcejeo en el área, el defensor Diego Ortegoza fue expulsado, dejando al equipo cordobés con diez hombres.

Malcorra se encargó de convertir el penal y puso a Rosario Central arriba 2-1.


A pesar de jugar con un jugador menos, Talleres no se rindió y continuó buscando el empate.

La perseverancia de los jugadores dio sus frutos cuando, en una jugada rápida, Cristian Tarragona, quien entró como suplente, igualó el marcador en 2-2 en su primera intervención del partido.

Este resultado final fue crucial, manteniendo a Talleres en la lucha por los puestos de arriba, sumando 24 puntos, a solo seis del equipo líder.

El partido estuvo marcado por un ambiente tenso entre los jugadores y el cuerpo arbitral, ya que muchos aficionados y miembros del plantel consideraron que decisiones arbitrales desfavorables influenciaron el resultado.

Aunque el VAR sancionó correctamente los penales, la expulsión de Ortegoza dejó a Talleres en desventaja numérica, generando un debate en torno al rendimiento del árbitro.

El equipo cordobés ha mostrado en varias ocasiones que es un competidor fuerte en la liga, y a pesar de la adversidad, demostró tener lo necesario para seguir luchando en el campeonato.

Con esta igualdad, Talleres quedó en una posición complicada para su siguiente partido, ya que el calendario se torna exigente.

La estrategia del equipo y la capacidad para lidiar con la presión serán fundamentales para no perder puntos en la próxima etapa del torneo.

Rosario Central, por su parte, sigue luchando por salir de la racha negativa en la que se encuentra, habiendo ganado solo una de sus últimas seis presentaciones.