El equipo cordobés no logra levantar el ánimo en el Torneo Apertura y cae en su debut en la Copa Libertadores frente al San Pablo.
Talleres de Córdoba continúa enfrentando problemas en su desempeño, y esta situación se ha agudizado tras su reciente presentación en la Copa Libertadores.
En el marco del torneo continental, el equipo dirigido por Alexander 'Cacique' Medina no ha podido revertir su suerte en el Torneo Apertura, donde solo ha logrado una victoria en once partidos disputados.
La expectativa era alta entre los aficionados de Talleres para el debut en la Copa Libertadores, que tuvo lugar este miércoles en el estadio Mario Alberto Kempes, lleno de hinchas esperanzados.
Sin embargo, la ilusión de los seguidores contrasta con la falta de efectividad de su equipo, que comenzó esta nueva etapa con una caída por 1-0 ante el San Pablo, dirigido por el argentino Luis Zubeldía.
Durante la primera mitad, Talleres tuvo la posesión del balón, moviéndolo de lado a lado. No obstante, a pesar de su dominio en la tenencia, el equipo no logró penetrar la sólida defensa del San Pablo, quien se había dispuesto en un esquema 4-4-2, esperanzado en encontrar la oportunidad adecuada para golpear.
Las únicas aproximaciones del conjunto cordobés llegaron a través de un disparo lejano de Camilo Portilla, que fue fácilmente controlado por el arquero rival, Rafael.
Por su parte, San Pablo tuvo una oportunidad clara que fue convertida en gol por Jonathan Calleri, aunque este tanto fue anulado por el VAR debido a un fuera de juego.
Las emociones se intensificaron en la segunda mitad, especialmente tras la salida por lesión del atacante brasileño Rick, lo que permitió a Talleres incrementar su peso ofensivo.
Con el ingreso de Sebastián Palacios y Valentín Depietri, junto a un Federico Girotti más ágil, las opciones de gol del equipo cordobés comenzaron a multiplicarse.
Sin embargo, el marcador se mantuvo sin cambios y el partido se tornó cada vez más tenso, con ambos equipos conscientes de que un solo gol podría definir el encuentro.
El único gol del partido llegó a través de Alisson, quien celebró con su director técnico, Luis Zubeldía, asegurando así la victoria para el San Pablo.
A pesar del empuje final de Talleres, que incluyó varios centros al área rival y un disparo que pegó en el travesaño, el equipo no logró concretar la igualdad.
Esta derrota en el inicio de la Libertadores es un duro golpe para Talleres, que aún no encuentra el rumbo correcto en la competencia local o internacional.
Históricamente, Talleres ha tenido participaciones irregulares en la Copa Libertadores, y su inicio en esta edición no hace más que profundizar las preocupaciones de su afición y directores técnicos vinculados al club.
Las expectativas eran altas, pero la falta de resultados sigue siendo una sombra preocupante para el equipo cordobés.
